Puesta de sol en Punta Nati | Lluís Comellas

Cae la tarde y el espectáculo se acerca. Da igual la época del año, las puestas de sol son casi siempre de gran belleza en Menorca, aunque de una forma especial en verano. Ese es uno de los momentos que cada día intentan inmortalizar muchos turistas.

Algunos de ellos optan por acercarse a los siempre fotogénicos faros, principalmente los de Cavalleria y Faro Nati, para captar ese mágico momento en el que sol se pierde el horizonte, pero la realidad es que el litoral menorquín está repleto de rincones menos concurridos desde los que disfrutar del ocaso.

Por encima de todos ellos se encuentra un enclave privilegiado desde el que disfrutar de la panorámica más amplia que se puede encontrar, la que ofrece la cota más de la Isla, Monte Toro. Si los atardeceres son bonitos, no menos atractivos resultan los amaneceres, como por ejemplo el que se puede contemplar desde Es Castell, el territorio nacional que, durante gran parte del año recibe los primeros rayos de sol de España.

  • Punta Nati. En el noroeste de Ciutadella, el faro es uno de los lugares favoritos para asistir al espectáculo de la puesta de sol. La impresionante panorámica del horizonte permite captar el esplendor luminoso del atarceder y el último rayo del sol antes de desaparecer tras el mar.
  • Pont den Gil. Se trata de un arco rocoso natural, próximo a la urbanización de Calas Piques, también en el noroeste de Ciutadella. Se accede tras caminar entre 5 y 10 minutos desde el aparcamiento. En esta curiosa roca natural pueden captarse divertidas fotografías del atardecer, que se refleja en el mar.
  • El Toro. Desde la cima de la montaña más alta de la Isla se disfruta de uno de los atarcederes más auténticos y especiales. Los visitantes pueden descubrir como los últimos rayos del sol bañan la mayor parte de la Isla, que se sumerge en una aura de luz anaranjada para despedir el día y dar paso a la noche.
  • Cabo de Cavalleria. Es uno de los acantilados más altos de la Isla y el más septentrional. Desde el faro que domina la costa norte de Es Mercadal, el visitante podrá disfrutar de la magia del atardecer, mientras el sol se pone tras colinas doradas y la línea del horizonte en la hora en que todo parece detenerse.