Calle Bergantí. Imagen de un grupo de operarios de la empresa que realiza la primera fase de las obras de instalación de la red de saneamiento en Cala Llonga, este viernes

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La Asociación de Propietarios de Cala Llonga ha reclamado al Ayuntamiento de Maó que no se abran zanjas en ninguna otra calle de la urbanización hasta que no se adopten soluciones a la lentitud con que se están desarrollando las obras de la primera fase de instalación de la red de saneamiento y se presente un programa realista de trabajo. Los representantes de una parte de los residentes mantuvieron el jueves una reunión de urgencia con los dirigentes municipales y la empresa adjudicataria para exponer su gran preocupación por el devenir de la actuación. El contenido de este encuentro se trasladó a los asistentes a la asamblea de vecinos celebrada el viernes por la tarde.

La presidenta de la Asociación, Chele Fox, comenta que «existe mucha preocupación por la lentitud de las obras, por lo general hay poco personal para ir detrás de la máquina, que se ha tenido que parar porque los operarios no dan abasto para retirar los escombros y cubrir las zanjas». Explica que cuatro semanas después del inicio de los trabajos todavía no se ha acabado la primera calle, la calle Bergantí, cuyos vecinos están soportando notorias molestias en pleno verano. Fox explica que en la reunión se les respondió que las obras están siendo dificultosas por las condiciones de la calle, con un terreno muy complicado. También les aseguraron, siempre según el relato de Fox, que la semana de vacaciones que tenía previsto iniciar estos días el personal de la empresa no se realizará hasta que la calle Bergantí no esté completamente acabada.

En este sentido, la demanda de la Asociación de Propietarios de Cala Llonga es que no se reanuden las obras en otro punto de la urbanización tras este periodo de descanso sin un programa de actuaciones «aceptable». «No queremos cinco calles abiertas al mismo tiempo y con los problemas que ha dado esta primera parte de las obras», explica. Fox reconoce que en los últimos días se ha visto algo más de personal en las zanjas. Ayer sábado la obra estava activa, aunque a bajo ritmo, explican desde la urbanización.