Un grupo de técnicos y economistas de prestigio, entre los que se encuentra el menorquín Guillem López Casasnovas, impulsa la construcción de una cuarta pista sobre el mar en el aeropuerto del Prat para relanzar las conexiones intercontinentales con Barcelona, pero sin incrementar su tráfico aéreo, lo que supondría desviar diversas rutas nacionales y europeas a Girona y Reus. El objetivo es ganar conectividad directa con Asia y Estados Unidos, sacrificando otras líneas domésticas.
Menorca se ‘salva’ de la propuesta de desviar los vuelos de Barcelona a Reus y Girona
Piden a Aena construir una pista sobre el mar en El Prat para las rutas con Asia y EEUU
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Grandísimo pelotazo para los promotores y constructoras muy poco justificado, ya que el tráfico aéreo intercontinental en el mundo aún está lejos de los niveles de 2019. Y lo de llevar vuelos nacionales a Reus o Girona tampoco se ve razonable en absoluto. Y a ver si lo tenemos que pagar los españolitos para que luego algún vendepatrias ceda su gestión y/o su titularidad a los independentistas. El problema de Barcelona como "hub" no es tanto la longitud de la pista como el atractivo de la propia ciudad frente a sus competidoras. De hecho, la aerolínea Emirates utiliza Barcelona como escala intermedia desde Dubai hacia Ciudad de México con un Airbus 350-900, y también lo hará de nuevo con un A380, lo que no se ve impedido por la longitud de la pista.