Imagen de las negociaciones de las izquierdas para el tripartito del Consell en 2015 | Josep Bagur Gomila

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La propuesta de Més per Menorca de discutir al PP la silla del senador por la Isla con una candidatura unitaria de izquierdas genera entre sus dos principales destinatarios expectativas comedidas de éxito, además de alguna crítica por las maneras de la formación nacionalista. Podemos y PSOE se muestran dispuestos a hablar de la cuestión, puesto que comparten la bonanza del objetivo, pero advierten de que la generosidad en los planteamientos siempre tiene un límite.

Desde el PSOE, la vicesecretaria general en la Isla, María José Camps, afirma de entrada que «al diálogo en política nunca se tiene que renunciar, no descartamos nada». Aunque matiza que queda ver «cuál es la propuesta concreta que hace Més». En el proceso de conversaciones que se prevé abrir en breve, Camps entiende que «habrá que ver hasta donde tenemos que llegar».

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Por parte de Podemos, su secretaria general, Mae de la Concha, explica que la candidatura unitaria al Senado es una opción de la que se venía hablando, «porque se ha comprobado que el Senado tiene mucha importancia, y es interesante conseguir tener presencia en esta cámara». De la Concha se muestra predispuesta a negociar con los partidos implicados por una opción que ve alcanzable, y recuerda que para las elecciones generales ya existe un acuerdo con EU para concurrir como Unidas Podemos.

De la Concha y Camps coinciden en criticar que Més per Menorca anunciara en prensa su propuesta de candidatura unitaria antes de dirigirse a los potenciales socios. «Nosotros queremos hablar, pero no con tuits o a través de los medios», afirma la representante de Podemos. Camps, además del hecho de haber antepuesto la divulgación a la comunicación al afectado, critica que algunas voces de peso en Més hayan empezado ya a vetar candidatos. El dirigente de Més Miquel Àngel Maria se posicionó ayer en IB3 Ràdio en contra de De la Concha como candidata, de quien dijo que «ha desaparecido en el Congreso». «No son maneras», afirma Camps.