Vista general de una calle destruida en Alepo | STRINGER

TW
0

El retraso en la evacuación de civiles y rebeldes prevista para este miércoles en el este de Alepo (norte de Siria) se ha retrasado por diferencias entre las partes en conflicto, que libran ahora intensos combates en zonas en poder de los opositores.

El alto el fuego alcanzado en las últimas horas para la salida de los combatientes y civiles ha saltado por los aires y se desconoce cuando se llevará a cabo la evacuación, que estaba previsto que comenzara a las 05.00 hora local (03.00 hora GMT).

Los autobuses que iban a transportar a los rebeldes y civiles evacuados se han retirado y están regresando a sus bases, dijo a Efe el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abderrahman.

El embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, anunció ayer que el Ejército sirio había detenido sus operaciones en Alepo y que se había llegado a un pacto para la salida de combatientes opositores, pero el cese de hostilidades sólo ha durado unas horas.

Según el Observatorio, son las autoridades sirias las que impiden la aplicación del pacto forjado entre Rusia y Turquía para una evacuación por no haber sido consultadas, mientras que los opositores acusan a Irán, porque quiere incluir en el acuerdo algún punto referido a los cercanos pueblos de mayoría chií de Fua y Kefraya.

El motivo, según el Observatorio, es que entre los rebeldes hay unos 250 guerrilleros extranjeros que las autoridades sirias quieren detener e investigar, y el hecho de que el Ejército considere que no recibe nada a cambio en este pacto, ya que estaba a punto de tomar totalmente el área rebelde.

Hasta ahora, los medios oficiales sirios mantienen el silencio sobre este tema, aunque ni siquiera confirmaron ayer la existencia de un acuerdo para la evacuación.

El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, expresó hoy, por su parte, su confianza en que la situación en el oeste de Alepo se resuelva «en los próximos dos o tres días», periodo en el que los guerrilleros que quedan «cesarán la resistencia».

Desde Ankara, el ministro de exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, aseguró hoy que en Alepo continúa el fuego cruzado y pidió a todas las partes que respeten la tregua acordada.

«Está Rusia, está Irán, hay grupos apoyados por Irán y el régimen (en Alepo). Hay un acuerdo y cada parte debe respetarlo», dijo Çavusoglu, quien explicó que la evacuación de los civiles aún no ha comenzado debido a que continúa el fuego cruzado.

«Anoche conversé con el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, (Serguéi) Lavrov, y hablaré hoy con el ministro de Relaciones Exteriores iraní», Mohamad Yavad Zarif, añadió.

En paralelo al anuncio en el retraso en la evacuación, estallaron intensos combates entre los efectivos gubernamentales sirios y diversas facciones en las áreas en poder de los opositores en el este de Alepo y en las que están manos de las autoridades, según el Observatorio.

Al mismo tiempo, los leales al presidente sirio, Bachar al Asad, disparaban fuego de artillería contra los barrios dominados por los insurgentes, y los rebeldes lanzaban cohetes contra los distritos controlados por las fuerzas gubernamentales en el oeste de Alepo.

La ONG destacó que unas 15.000 personas iban a abandonar Alepo, de las que 5.000 eran insurgentes y 10.000 civiles, entre los que hay familiares de combatientes.

Según el Centro Ruso para la Reconciliación (CRC) en Siria, casi 5.992 civiles, 2.210 de ellos niños, fueron evacuados en las últimas 24 horas de las zonas controladas por los rebeldes, según dijo un portavoz a la agencia rusa Interfax

Además, en el mismo período un total de 366 guerrilleros depusieron las armas y salieron a la parte occidental de Alepo, de los cuales 329 fueron amnistiados «por decisión del presidente» Asad.