Los miembros del ejército ucraniano en tanques cerca de la ciudad de primera línea de Bajmut, región de Donetsk. | Reuters

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El Ejército ucraniano respondió en las últimas 24 horas a unos 90 ataques rusos dirigidos principalmente contra zonas del noreste y el este de Ucrania, donde se concentran los mayores combates entre ambos bandos. Según informó este jueves el Estado Mayor del Ejército ucraniano, la ofensiva rusa se concentra en la región de Járkov, en el noreste, y en las vecinas de Lugansk y Donetks, en el este, ambas fronterizas con Rusia.

«Ucrania repelió ataques cerca de Kupiansk, en el este de la región de Járkov, no muy lejos de la vecina Lugansk, y en las poblaciones de Lyman, Bajmut, Adviika y Shakhtarsk, en Donetsk», donde, según el Estado Mayor, «Rusia está concentrando sus principales esfuerzos ofensivos». Precisamente, en la estratégica localidad de Bajmut, el ejército ucraniano asegura que los enfrentamientos se mantienen «calle por calle», dado que el control de la zona permitiría a cualquiera de los bandos disponer de un corredor seguro para transportar armas y soldados.

El Estado Mayor también informó de que Rusia lanzó 19 ataques aéreos y 37 ataques con sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple durante el último día, causando daños en pueblos y aldeas e hiriendo a un número no especificado de civiles. Kiev asegura que Moscú mantiene su dura ofensiva en la zona para lograr el control total sobre Donetsk, una de las cuatro regiones que Moscú se anexionó unilateralmente el pasado mes de septiembre y que no ha logrado aún ocupar totalmente.

«Las milicias locales apoyadas por Rusia y los grupos mercenarios privados, como el Grupo Wagner, respaldado por el Kremlin, han estado ayudando a las fuerzas regulares rusas en el área y han sufrido grandes pérdidas», precisó el Ejército ucraniano citado por las agencias locales. También advirtió de que la amenaza de que Rusia lance ataques con misiles «sigue siendo alta en toda Ucrania» y, por ello, las autoridades ucranianas mantienen un refuerzo de las medidas de seguridad en todo el país, que mañana vivirá el primer aniversario del inicio de la invasión.

También en el sureste ucraniano, en la región de Jersón, se produjeron este miércoles ataques que mataron, según la administración regional, a al menos dos civiles. «Los ocupantes rusos dispararon 71 veces en la región de Jersón. Atacaron con varias armas: MLRS (sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes), morteros, artillería, tanques y vehículos aéreos no tripulados», señalaron las autoridades regionales. Esta región está ocupada en parte por el Ejército ruso, que se retiró a la orilla izquierda del río Dniéper el pasado mes de enero y la dejó partida en dos.