Violencia en la zona ocupada de Cisjordania. | Redacción Digital

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Un palestino murió por disparos de un colono israelí tras llegar armado con cuchillos y explosivos a un asentamiento judío en el norte de Cisjordania ocupada, en una escalada de violencia que no cesa. La muerte del palestino fue confirmada por el Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que lo identificó como Abed al Karim al Sheij, de 21 años. "Esta mañana, un terrorista armado con cuchillos y artefactos explosivos llegó al área de Dorot Ilit.

El dueño de la tierra vio al terrorista y le disparó y lo neutralizó«, informó un portavoz del Ejército israelí. »Las fuerzas de seguridad registraron el área y no se encontraron más sospechosos en el lugar", agregó el Ejército. La agencia oficial de noticias palestina, Wafa, señaló que, poco después, fuerzas israelíes llevaron a cabo una redada en la aldea de Saniriya, donde residía Al Sheij. Estos episodios siguen a una violenta noche en Cisjordania, con varios incidentes entre palestinos y tropas israelíes.

Según un portavoz militar, grupos de palestinos dispararon y lanzaron explosivos contra tropas israelíes durante una operación del Ejército en la ciudad palestina de Tulkarem, ante lo que los soldados respondieron abriendo fuego. Por otra parte, en una operación conjunta entre el Ejército, la Policía de Fronteras y el Servicio de Seguridad Interior (Shin Bet), fuerzas israelíes irrumpieron en la ciudad cisjordana de Ni'lin y arrestaron a dos familiares del palestino que llevó a cabo un ataque anoche en el centro de Tel Aviv, en el que tres personas resultaron heridas.

El atacante, que murió por disparos de la Policía israelí, fue identificado como Moataz Billah al Jawaja y reconocido por el movimiento islamista Hamás como uno de sus miembros. Durante la redada anoche en Ni'lin, las fuerzas israelíes comenzaron los preparativos para la demolición de la residencia de Al Jawaja, una política habitual contra atacantes palestinos.

Esta operación desencadenó enfrentamientos con residentes locales, que según el Ejército «arrojaron artefactos explosivos, decenas de cócteles molotov y piedras contra las fuerzas», quienes respondieron con disparos. Estos episodios se enmarcan en una escalada de violencia en la región, que registra el inicio de año más dureza en dos décadas con más de 75 palestinos muertos en lo que va de 2023. Muchos de estos fallecimientos se han producido durante redadas militares israelíes en Cisjordania, la más reciente de ellas ayer, cerca de la ciudad de Yenín y que causó la muerte de tres milicianos palestinos. Del lado israelí la cifra de muertos alcanza los 14, en su mayoría civiles y todos fallecidos durante ataques de palestinos.