La reacción del Gobierno a la entrada de Finlandia en la OTAN

Con la adhesión de Finlandia, la OTAN dobla su frontera terrestre con Rusia y «en todo momento se hace un análisis de riesgos y amenazas», afirmó Albares, que se negó a opinar sobre si la Alianza debe desplegar sus tropas en el nuevo país, como ya ocurre en Estonia, Letonia, Lituania, Polonia Bulgaria, Hungría, Rumanía y Eslovaquia.

El ministro de Exteriores finlandés, Pekka Haavisto, entregó hoy el instrumento de ratificación del Tratado de Washington al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken -cuyo país custodia el acuerdo- y en ese momento se certificó el ingreso de Helsinki a la OTAN, coincidiendo con el 74 aniversario de la organización.

Finlandia entró así antes que Suecia, a pesar de que ambos países solicitaron el ingreso a la vez, porque Hungría y Turquía no han ratificado aún la entrada de Estocolmo. «Nosotros ya hemos hecho lo que teníamos que hacer para facilitar que Suecia pueda ser parte de la OTAN. Y lo que esperamos es que, cuanto antes, todo el mundo siga el mismo camino», apuntó Albares.

El ministro dijo también que durante la reunión de hoy y mañana «la voz de España se oirá para subrayar la importancia del vecindario sur y de eso que en el lenguaje de la OTAN se denomina la OTAN de 360 grados». España, Italia y Portugal quieren que la Alianza apruebe un plan de cooperación política y defensiva a largo plazo con los países del flanco sur de la OTAN.