1.500 soldados que combaten en Ucrania y la guardia de honor china desfilan en la plaza Roja

Kusturica y Seagal, entre los invitados a la parada militar en Moscú

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Más de 11.500 militares rusos y de otros trece países participaron en la parada militar de la Victoria en la plaza Roja, entre ellos 1.500 combatientes de la guerra en Ucrania. Frente al Mausoleo de Lenin también desfiló la guardia de honor del Ejército Popular de Liberación de China, a la que siguieron destacamentos de otros países.

El jefe del Kremlin, Vladímir Putin, presidió la parada junto a los líderes de China, Xi Jinping, y de una treintena de países invitados, incluido Brasil, Egipto, Eslovaquia, Venezuela y Vietnam. Al término de la parada, Putin descendió de la tribuna y saludó uno por uno a los oficiales del Ejército ruso y de los países cuyas unidades marcharon por el empedrado de la plaza.

80th Victory Day observed in Moscow
Un batallón norcoreano en Moscú. Foto: Reuters.

Con ocasión del 80 aniversario de la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nazi, por la plaza marcharon unas 130 máquinas de guerra, entre ellas los legendarios tanques soviéticos T-34 y las piezas de artillería autopropulsada SU-100, utilizados durante la Segunda Guerra Mundial. Como novedad, los drones de asalto que son utilizados en la campaña militar en Ucrania desfilaron a bordo de camiones todoterreno Kamaz.

El director de cine serbio Emir Kusturica y el actor estadounidense-ruso Steven Seagal se encontraban en la tribuna de invitados a la parada militar en la plaza Roja de Moscú. Como es tradición, entre los asistentes se encontraban miembros de Gobierno, del clero ortodoxo y de las comunidades musulmanas del país, así como los líderes de los partidos representados en el Parlamento.

Kusturica ha expresado en reiteradas oportunidades su respaldo al presidente ruso y a su política frente a Ucrania. «Apoyo a Putin porque es lo lógico. (Volodímir) Zelenski es un mal actor y un mal presidente», dijo en una entrevista el realizador serbio, que apoyó en 2014 la anexión de la península de Crimea por Moscú. Seagal, que recibió la ciudadanía rusa en 2016, es un gran admirador del presidente ruso. «Moriría por Putin», llegó a decir el actor.