El Ministerio de Justicia y CiU han llegado a un acuerdo para endurecer las penas de los delincuentes reincidentes que por la cuantía de lo robado, menos de 400 euros, no tengan responsabilidad penal y, de esta manera, podrán incluso ir a la cárcel sólo los fines de semana.
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Durán i Lleida, anunció este acuerdo, así como la inclusión en el Código Penal del agravamiento de las penas, de tres meses a un año de prisión, para los miembros de bandas de carteristas y la creación de un registro de faltas en un plazo máximo de un año.
De acuerdo con estas medidas, los autores de pequeños hurtos podrán ingresar en prisión, aunque únicamente tendrían que ir los sábados, domingos y festivos para, de esta forma, evitar la "sobreocupación" de las cárceles.
La puesta en marcha de un registro de faltas también es un elemento fundamental, a juicio de Durán i Lleida, para que los jueces puedan acceder de una forma rápida a los historiales de cada delincuente y dar "una respuesta" a la reincidencia.
Estas iniciativas se materializarán hoy, a través de una serie de enmiendas consensuadas con los socialistas, en la Comisión de Justicia, que aprobará el proyecto de ley de reforma del Código Penal.
Con estas propuestas, CiU responde a una "inquietud" ciudadana y de los ayuntamientos de grandes ciudades ante la reincidencia de algunos delincuentes, hasta el punto de que se han dado casos de algunos que han llegado a cometer casi 400 delitos en un año, según el portavoz de CiU.
UTILIDAD
El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, calificó ayer de "muy útil" la modificación del Código Penal para endurecer las penas de los delincuentes reincidentes.
Caamaño, en declaraciones en los pasillos del Congreso, confió en que otros partidos se sumen a este acuerdo y se busque una solución proporcionada, que ofrezca una respuesta a los ciudadanos afectados por este problema, como los pequeños comerciantes.
Según el ministro, estas reformas permitirán combatir "mucho más este tipo de delincuencia".
Por su parte el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, se mostró ayer satisfecho con el endurecimiento del Código Penal
Hereu se congratuló porque las faltas tendrán ahora una respuesta policial y judicial más eficaz, ya que la impunidad de la reincidencia de las faltas "amenaza la convivencia y la seguridad de Barcelona".
Agradeció la labor que, a su juicio, comenzó su antecesor en el cargo, Joan Clos, así como el empeño tanto de PSC como de CiU para lograr esta reforma tras negociar con el Ministerio de Justicia.
Xavier Trías, presidente de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, precisó que esta es una respuesta efectiva para mejorar la seguridad en las grandes ciudades, porque ahora "alguno se lo pensará más antes de cometer un robo".
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