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La prima de riesgo ha bajado 141 puntos básicos o el 25 por ciento durante esta semana al pasar de 552,3 puntos básicos a 410,9 puntos básicos al final de la jornada de ayer, gracias al anuncio del Banco Central Europeo (BCE) de que comprará deuda soberana de forma ilimitada.

La mayor parte de esa bajada se ha producido entre el jueves y el viernes, ya que la prima de riesgo ha bajado más de 100 puntos básicos o el 16,5 por ciento en ese período, hasta colocarse en su mínimo desde el mes de mayo.

Según fuentes próximas al Gobierno, el Ejecutivo de Mariano Rajoy esperaba que el anuncio del presidente del BCE, Mario Draghi, rebajara en hasta 200 puntos básicos la prima de riesgo de España, lo que eliminaría el componente especulativo que soporta.
En cualquier caso, el drástico descenso sufrido esta semana se ha debido fundamentalmente a la caída en la rentabilidad del bono español a 10 años, que se ha colocado en el 5,63 por ciento (su mínimo desde principios de abril), frente al 6,85 por ciento que ofrecía al cierre de la semana pasada.

En cambio, el rendimiento del bono alemán con vencimiento en 2022 ha avanzado hasta el 1,519 por ciento, frente al 1,334 por ciento del pasado viernes.
Los máximos de la prima de riesgo, que mide el sobreprecio que tienen que pagar los bonos españoles a 10 años para resultar atractivos respecto a sus homólogos alemanes, se tocaron el 24 de julio al ascender el diferencial a 638 puntos básicos y la rentabilidad de los títulos nacionales, al 7,62 por ciento.

Desde entonces, la prima de riesgo ha bajado 227 puntos básicos y el interés de los bonos españoles con vencimiento en 2022 ha caído también 200 puntos básicos.
Después de Portugal, España ha sido el país de la periferia de la zona euro más beneficiado con el anuncio de Mario Draghi, ya que
Italia ha visto bajar en menor medida su prima de riesgo, que se ha situado hoy en 353,9 puntos básicos, frente a los 451,37 puntos básicos del final de la semana pasada.
En cualquier caso, la prima de riesgo de España está al mismo

nivel actualmente que la de Irlanda, que la situó al cierre de ayer en 410,2 puntos básicos.
Por otra parte, el compromiso de comprar deuda anunciado en la víspera por el Banco Central Europeo (BCE) continuó ayer impulsando las compras en la bolsa española, que subió el 0,26 por ciento y se ha aproximado a 7.900 puntos a pesar de los malos datos de empleo estadounidenses.

El índice de referencia de la bolsa española, el Ibex 35, subió 20,80 puntos, equivalentes al 0,26 por ciento, hasta 7.882,80 puntos. En la tercera mejor semana del año sube el 6,23 por ciento y las pérdidas anuales bajan al 7,98 por ciento.
En Europa, con el euro cerca de 1,28 dólares, Milán ganó el 2,09 por ciento; Fráncfort, el 0,66 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,54 por ciento; Londres, el 0,3 por ciento, y París, el 0,26 por ciento.

De los grandes valores subieron Iberdrola, el 2,92 por ciento; BBVA, el 1,88 por ciento; Telefónica, el 1,82 por ciento, y Banco Santander, el 1,71 por ciento. Bajaron Inditex, el 6,74 por ciento, y Repsol, el 0,73 por ciento.