El presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, durante su comparecencia en el Palacio de La Moncloa | Sergio Barrenechea/EFE

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El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha ofrecido este lunes diálogo dentro de la ley al futuro Ejecutivo catalán y le ha instado a superar la fractura y la tensión por unas tesis independentistas que ha precisado que no eran posibles legalmente pero que este domingo se comprobó que tampoco tienen apoyo en las urnas.

Rajoy ha comparecido en el Palacio de la Moncloa para realizar una declaración tras las elecciones de Catalunya y ha remitido a la reunión que mantendrá esta tarde el Comité Ejecutivo Nacional del PP para analizar el resultado de este partido.

El jefe del Ejecutivo ha recordado que las de este domingo fueron las terceras elecciones autonómicas en Catalunya y ha recalcado que se trataba de elegir al nuevo Parlament aunque algunos quisieron dar a estos comicios un carácter plebiscitario para iniciar con ellas la separación del resto de España.

«Hoy sabemos que eso, que no era no es posible legalmente, tampoco ha obtenido el apoyo en las urnas», ha sentenciado el presidente, que ha precisado que no llegan a cuatro de cada diez los catalanes que han apostado por un programa rupturista.

Por ello, ha transmitido un mensaje de tranquilidad a los catalanes, al resto de españoles y los que se han interesado por estos comicios desde fuera de España.

«Los partidarios de la ruptura -ha insistido- nunca tuvieron el respaldo de la ley, y desde este domingo sabemos que tampoco tienen el apoyo de la mayoría de la sociedad catalana».

Ahora ha incidido en que lo que comienza en Catalunya es una nueva legislatura autonómica y deberá elegirse un nuevo Gobierno de la Generalitat que ha precisado que debe tener como misión trabajar para todos los catalanes, atender sus necesidades reales, resolver sus problemas y promover un mayor bienestar económico y social.

Esas son las funciones que ha dicho que le atribuye la Constitución española y el Estatut, las dos normas sobre las que ha subrayado que se fundamenta su legitimidad.

En ese contexto, ha instado al futuro Govern a gobernar para todos, «superar la fractura, la tensión y los enfrentamientos» de los últimos años y «sustituir el monólogo y la imposición unilateral por el diálogo constructivo y leal».

«Invito al futuro Gobierno a devolver a Catalunya a la senda de la convivencia normalizada, de la pluralidad, de la libertad y del respeto a las leyes», ha añadido Rajoy antes de asegurar que en esa tarea encontrará en su Ejecutivo toda la colaboración.

Pero ha advertido de que siempre será dentro de la ley y desde el máximo respeto institucional.

Ante la pregunta de si su disposición al diálogo dentro de la ley implica que pueda hacer alguna oferta a Catalunya, ha explicado que él está dispuesto a hablar y a escuchar lo que quiera plantear el futuro Gobierno de la Generalitat pero no a liquidar la legalidad porque eso es «insano y antidemocrático».

«Si hay alguien que pretende liquidar la soberanía nacional o la unidad nacional, que lo diga. Yo, de lo demás, estoy dispuesto a hablar», ha agregado.

No ha conversado con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, ni con el de Ciudadanos, Albert Rivera, tras conocer los resultados en Catalunya, pero ha considerado evidente que, en los sustancial, el PP y estos partidos coinciden en no poner en tela de juicio los principios básicos de la convivencia en España.

En consecuencia, ha admitido que es bueno hablar con ellos, como ha recordado que ha hecho en los últimos tiempos sobre todo con Sánchez.

Para Rajoy, Catalunya demostró una vez más su pluralidad política y ha felicitado a sus ciudadanos por la madurez y responsabilidad democrática demostrada con una alta participación en los comicios ante la magnitud del reto al que se les convocaba por la Generalitat.

Ha recordado además que durante toda la legislatura su Gobierno ha apoyado a los catalanes y ha colaborado para mantener la viabilidad económica de la Generalitat y los servicios esenciales que de ella dependen.

Y ha citado en concreto medidas como el Fondo de Liquidez Autonómica o el Plan de Pago a Proveedores.

Algo que ha hecho, según ha explicado, por lealtad institucional y por profundas convicciones políticas debido a que ningún español, con independencia de donde viva, pude quedar fuera de atención.

Además, ha explicado que todo país fuerte y solidario como España afronta sus retos desde la unidad y la cooperación entre todos.

«Esa misma lealtad y disposición al diálogo la seguirá encontrando el nuevo Gobierno de la Generalitat. Siempre la hemos tenido, la tenemos y la seguiremos teniendo, pero siempre de la ley», ha reiterado.

Con la misma determinación que ofrece su colaboración, ha garantizado que su Ejecutivo seguirá velando por que se respete el estado de derecho, la igualdad de todos los españoles y sus derechos y libertades.

«Juntos ganamos todos, tenemos por delante un futuro prometedor podemos hacer grandes cosas todos unidos, debemos intentarlo y ese es el deseo de la inmensa mayoría de españoles», ha proclamado.