Los diputados soberanistas, fotografiados en el trámite para registrar la ley del referéndum independentista de Cataluña. | CUP (Twitter)

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Los grupos independentistas JxSí y la CUP han registrado en el Parlament catalán la ley con la quieren convocar, organizar y celebrar el referéndum del 1 de octubre sobre la independencia de Cataluña, y han pedido tramitarla por el mecanismo de «urgencia extraordinaria».

Ahora, esta ley quedará pendiente de una reunión de la Mesa del Parlament para que empiece su trámite parlamentario, una reunión que no será antes del 16 de agosto, ya que la cámara legislativa cierra sus puertas este lunes y no las abrirá hasta entonces.

La ley del referéndum fue presentada por ambos grupos soberanistas junto con el Govern el 4 de julio en un acto en el Teatre Nacional de Cataluña (TNC), algo que motivó que la Guardia Civil fuera días más tarde al teatro para requerir información sobre el acto.

En rueda de prensa tras registrar la ley, el líder de JxSí, Lluís Corominas, ha asegurado que Cataluña celebrará un referéndum, aunque se opongan el gobierno central y, eventualmente, el Tribunal Constitucional.

Corominas ha explicado que el registro a esta ley es la respuesta a que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, impugnara el viernes la reforma del reglamento de la Cámara y ha concluido: «La democracia en Cataluña no la parará ni el señor Rajoy ni el Constitucional».

El diputado de la CUP Benet Salellas, en clara alusión al espacio políticos de 'los comuns' de Ada Colau, han confiado en sumar apoyos a la ley que vayan más allá de JxSí y la CUP: «No es una ley de partido, es una ley de país y para el país».

La ley del referéndum prevé que el Parlament proclame «inmediatamente» la independencia si gana el 'sí' el 1 de octubre, y no fija una participación mínima para dar por válido el resultado de la votación.

Urgencia

Según figura en el artículo 105.1 del reglamento de la Cámara, el procedimiento de urgencia lo pueden pedir una quinta parte de los diputados -JxSí y la CUP lo cumplen de sobra- y supone reducir los trámites «la mitad de los plazos» habituales.

Además, tanto JxSí como la CUP se guardan la carta de tramitarla por un mecanismo aún más urgente, el de lectura única, -les permitiría aprobarla con un solo debate y sin dar a la oposición la oportunidad de presentar enmiendas-, pero es precisamente el mecanismo que el Gobierno ha impugnado ante el Constitucional.

Ni JxSí ni la CUP han desvelado qué piensan hacer si el Constitucional tumba este punto del reglamento: «No responderemos a cosas que de momento no han pasado», ha zanjado la portavoz de JxSí en la Cámara, Marta Rovira.

Firmas

La ley que han registrado, cuyo nombre oficial es proposición de ley del referéndum para la autodeterminación de Cataluña, lleva la firma de 67 diputados, 57 de JxSí y 10 de la CUP.

De entre los independentistas, solo faltan las firmas de los 4 diputados de JxSí que son miembros de la Mesa: la presidenta, Carme Forcadell; el vicepresidente, Lluís Guinó, y las secretarias Anna Simó y Ramona Barrufet.

Han considerado que, por razones de «imparcialidad», era conveniente que estos cuatro diputados no firmaran la ley, ya que serán al mismo tiempo los encargados de tramitarla en tanto que miembros de la Mesa.

La primera reunión de la Mesa del Parlament está fijada para el miércoles 16 de agosto y, en manos de JxSí -que tiene mayoría en el órgano-, está decidir si empieza ya el trámite parlamentario de la ley o aún se espera unas semanas.