El sospechoso de la desaparición de Marta Calvo. | Efe

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Trece días después de que el detenido por la desaparición de Marta Calvo se entregara voluntariamente ante la Guardia Civil, se ha filtrado parte de la declaración que Jorge Ignacio Palma realizó ante los agentes en el cuartel de Carcaixent. Es la única declaración que hay del detenido, ya que se negó a hablar en sede judicial.

El programa Espejo Público ha desvelado este martes el testimonio del colombiano de 38 años, quien no reconoce haber cometido ningún crimen, sino que la muerte de Marta fue un accidente tras consumir drogas y alcohol.

■ El detenido dice que Marta Calvo murió al mantener relaciones sexuales con consumo de droga

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Su relato empieza así: «Conocí a Marta a través de una pagina web, unas semanas antes del día 7 de noviembre. Quedamos y tuvimos relaciones en su casa, un piso en el centro de Valencia. Después intercambiamos algún Whatsapp y volvimos a quedar. Acordamos ir a mi domicilio de Manuel en mi coche, un Volkswagen Passat de color azul. Durante el camino hablamos de gustos musicales. Ella me dijo que llevaba dos días de fiesta. Llegamos sobre las 2 o 3 de la madrugada. Primero estuvimos en la planta baja, allí consumimos whisky que había traído ella y cocaína, después subimos al piso de arriba».

En su declaración, Jorge Ignacio, que se encuentra en prisión provisional, asegura que una vez que llegaron a su casa mantuvieron sexo durante varias horas. «Seguimos bebiendo y consumiendo cocaína sobre su cuerpo de forma voluntaria, en total unos 6 gramos. Ya estaba amaneciendo cuando la chica dijo que no se sentía bien, que estaba cansada y que quería parar. Se tomó una ducha y después nos acostamos a dormir juntos».

Su relato concluye cuando tras explicar que sorpresivamente se despertó y la joven Marta Calvo ya estaba muerta. «Tras varias horas dormido me desperté, creo que era mediodía o incluso algo más tarde. Traté de despertar a la chica, pero cuando fui a abrazarla noté su cuerpo rígido. Le tomé el pulso en el cuello y en el brazo y comprobé que estaba muerta. Llegué incluso a levantar la persiana para verla mejor. Pensé que lo mejor que podía hacer era deshacerme del cuerpo y después suicidarme».