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El PSOE y Unidas Podemos han apuntalado este lunes su compromiso en la lucha contra la emergencia climática, su apuesta por la reducción de residuos y el fomento de la economía circular y el propósito de frenar la pérdida de biodiversidad, con especial énfasis en el impacto de las especies exóticas invasoras.

Así lo recoge el acuerdo para un gobierno progresista de coalición rubricado en el Congreso de los Diputados por el candidato socialista a la Presidencia, Pedro Sánchez, y el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias.

Ambos partidos han acordado la aprobación de una Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica que se marque como objetivo la generación de energía eléctrica cien por cien renovable en 2050 y entre el 85 y el 95 por ciento en 2040.

Para ello, el pacto establece la fijación de objetivos de emisiones de gases de efecto invernadero y de energía para vertebrar las políticas energéticas, de transporte, de producción industrial y las urbanas garantizando una transición justa.

En este sentido, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima abordará la reforma del mercado eléctrico y la bajada de la factura y definirá un mix energético para el periodo 2021-2030 que haga el sistema más justo y genere certidumbre a los inversores.

Además, se pondrán en marcha planes de acción urgente para las comarcas afectadas por el cierre de centrales de carbón y de energía nuclear con calendario conocido, de manera que se definan escenarios estables, predecibles y competitivos para estas áreas.

PSOE y Unidas Podemos se comprometen asimismo a impulsar la aprobación de una ley de plásticos de un solo uso como parte de la Estrategia de Economía Circular, para alcanzar el 'residuo cero' en el horizonte 2050.

Así, se impulsará el ecodiseño, la ecoinnovación o la reintroducción de subproductos y residuos como materia prima de otros ciclos productivos -que generará nuevas oportunidades de empleo- y medidas de eficiencia en sectores clave, como la construcción, la alimentación, el turismo o el textil.

El pacto establece la creación del Fondo de Compensación de Daños Medioambientales, que se constituirá a partir de los recargos en las pólizas de seguro obligatorias a los operadores cuyas actividades perjudiquen al medio ambiente.

PSOE y Unidas Podemos han acordado asimismo la creación de una Ley de Movilidad Sostenible, que contemplará la financiación del transporte público, con especial énfasis en la sostenibilidad económica de las áreas metropolitanas de las grandes ciudades.

Además, se pondrá en marcha un esquema de ayudas económicas para el vehículo eléctrico, se revisará el modelo de peajes de la red viaria de alta capacidad para garantizar su uso eficiente, se promoverán inversiones sostenibles en los puertos y se impulsará el plan de cercanías 2019-2025.

El pacto prevé también la aprobación de un plan nacional de depuración, saneamiento, eficiencia, ahorro y reutilización de agua que apueste por la racionalización del recurso en línea con las directrices europeas y en un contexto de disminución de la disponibilidad hídrica como consecuencia de la crisis climática.

PSOE y Unidas Podemos se comprometen a ampliar la red de espacios protegidos, a los que dotarán de una financiación adecuada para acometer la defensa de la biodiversidad con el mantenimiento del medio rural, y se establecerá un plan de acción contra las especies exóticas invasoras que amenazan la biodiversidad.

En el apartado de océanos, el acuerdo contempla la reducción del uso del plástico y la lucha contra la pesca ilegal, no regulada y no documentada, así como la ampliación de las áreas marinas protegidas y la trazabilidad de los alimentos procedentes del mar para fomentar la pesca sostenible.

Por último, el pacto contempla la aprobación de una Ley de Bienestar Animal, que garantice una relación respetuosa hacia todos los seres vivos y establezca el delito de maltrato de animales salvajes en su medio natural y una revisión de las penas al abandono de animales domésticos.

El pasado 12 de noviembre, 48 horas después de las elecciones, Sánchez e Iglesias sellaron, también en el Congreso, el preacuerdo para conformar un gobierno, que ambos calificaron de «rotundamente progresista» basado en la lealtad, con un horizonte de cuatro años y diez ejes de actuación, entre ellos la lucha contra la emergencia climática y la despoblación.