Corinna Larsen sitúa como punto de inflexión aquel fatídico safari a Botswana.

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Corinna zu Sayn-Wittgenstein, también conocida como Corinna Larsen, ha concedido una extensa entrevista en la BBC en la que comenta con todo lujo de detalles su relación con el Rey Juan Carlos. Además de desvelar innumerables datos sobre su vida privada, la germana de origen danés también trata algunos temas de calado económico y político, temas plenamente de actualidad que según ella fundamentan que el monarca emérito se haya apartado del ojo público en España, tras años depreciándose su imagen pública desde aquel polémico safari en Botswana.

Ese viaje, de hecho, es un argumento central en la entrevista de Corinna en la BBC, puesto que según ella supone un punto de inflexión, tanto en la vida pública del jefe de Estado de España como en su relación personal. Corinna, que se declara cazadora, rechaza la muerte del elefante en aquel día para olvidar, y asegura que truncó toda la experiencia compartida con Juan Carlos de Borbón, que se rompió la cadera en ese mismo viaje. A partir de aquí, siempre según su versión, se iniciaron seguimientos exhaustivos a su persona, y movimientos en el entorno cercano del Rey, empujando a la abdicación.

En su reportaje, el medio público británico desgrana desde las grabaciones reveladas por el comisario Villarejo hasta los detalles de la supuesta donación, dada a conocer en los medios de comunicación, de gran parte de los 100 millones de dólares de Arabia Saudí, «unos 76 millones». Sobre ellos Corinna afirma que no cree que le fueran legados para blanquearlos, sino como un regalo que ha acabado por ponerla en el punto de mira de las autoridades fiscales suizas.

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Sobre esa 'donación', Corinna revela en la BBC que «estaba muy sorprendida porque obviamente es un regalo enormemente generoso. Diré, sin embargo, que habíamos tenido conversaciones en 2011 sobre su deseo de gestionar su testamento en vida. Empezó a hablar sobre su muerte y lo que quería dejar en su testamento».

«También mencionó que quería ocuparse de mí, pero no discutimos cantidades. Le preocupaba que su familia no respetara su voluntad», sostiene, apuntando que en paralelo alguien registró su apartamento en Mónaco y recibió una visita del director del CNI.

Sobre la situación financiera del Rey emérito, Corinna augura que «habrá cientos de cuentas en otras jurisdicciones», además de en Suiza. Para la empresaria resulta «extraordinario» que «40 años del modus operandi de una empresa familiar», en referencia a la Casa Real, los focos mediáticos y judiciales hayan acabado prestándole atención a ella, alguien con un papel minúsculo en esta trama.

En su faceta más personal Corinna apunta para la BBC que «no me arrepiento para nada de mi relación con Juan Carlos». «Tengo sentimientos muy sinceros por él. Y me entristece extremadamente el rumbo que han tomado las cosas», añade. Incluso llega a decir que Juan Carlos le trasladó a su padre el interés de casarse con ella.