La oposición recrudece sus críticas contra la gestión de la presidenta de Madrid. Imagen de su intervención en la segunda sesión del debate sobre el estado de la región en la Asamblea de Madrid. | Efe

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El anuncio del Gobierno de la Comunidad de Madrid, en boca de su viceconsejero de Salud Pública y Plan COVID-19, Antonio Zapatero, sobre la implantación de medidas «más drásticas» para frenar el avance del coronavirus «en la línea de confinamientos selectivos» ha encendido las alarmas, y ha creado incertidumbre entre la población, además de manifestar dificultades de comunicación en el seno del ejecutivo regional.

Este miércoles Zapatero anunció que el próximo fin de semana se anunciarán medidas especiales en zonas con más incidencia de casos de coronavirus, restricciones a la movilidad y concentración de personas. Parece en un primer momento una actuación similar a la emprendida en Palma, en las zonas de Arquitecte Bennàssar y otras del entorno de Son Gotleu, hermanas de las adoptadas en algunos puntos de Cataluña y Aragón, entre otros, que en semanas anteriores han permitido rebajar cifras preocupantes en esos territorios.

Sin embargo, el representante madrileño de Salud no expresó con claridad el alcance de dichas medidas, y entre las poblaciones del sur de la capital como Puente de Vallecas cunde la duda: algunos no saben si podrán ir a trabajar o ir al médico, por ejemplo.

Los términos usados por el segundo de la cartera sanitaria del gobierno de Díaz Ayuso no fueron del todo exactos, e incluso otros miembros del ejecutivo confirmaron no saber nada del anuncio hasta que este se produjo. Después se cancelaron citas antes los medios de comunicación y desde entonces reina el silencio, a la espera de que se concrete el plan de aislamiento parcial de Madrid.

Mientras tanto la oposición recrudece sus críticas contra la gestión de Ayuso, en un contexto donde los contagios no paran de crecer, y la Comunidad de Madrid estudia ya la reapertura del Hospital del Ifema, aquel que fue cerrado entre celebraciones y bocatas de calamares repartidos por las autoridades.

El aumento de contagios y el incremento de la presión hospitalaria son claros en la región de Madrid, con 2.761 ingresados en el hospital por coronavirus, según el informe que publica este miércoles la Consejería de Sanidad madrileña. Los contagios por coronavirus en la Comunidad de Madrid han sufrido un repunte en las últimas 24 horas, al pasar de 912 a 1.501, un incremento del 64 %, al que hay que sumar 3.433 positivos por PCR que datan de días anteriores y han sido incorporados ahora al recuento, mientras que la cifra de fallecidos se mantiene estable con 27, dos más.