Pedro Sánchez hablando con Charles Michel, en Bruselas. | YVES HERMAN

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El Gobierno prevé incrementar la recaudación tributaria en 6.847 millones de euros en 2021 gracias a la subida o creación de nuevos impuestos, entre ellos a las bebidas azucaradas y los envases de plástico, y a la modificación de otras figuras tributarias directas, indirectas y ambientales.

El plan presupuestario remitido este martes a Bruselas cuantifica en 9.170 millones el impacto de las medidas tributarias que el Ejecutivo planea poner en marcha, ya sea en las propias cuentas o con legislación específica, de los que 6.857 millones serán en 2021 y 2.323 millones, en 2022.

Además de los ya aprobados impuestos sobre las transacciones financieras (con un impacto de 850 millones en 2021) y determinados servicios digitales (968 millones), el Gobierno prevé aprobar un impuesto sobre los envases de plástico no reutilizables (491 millones).

Con este impuesto, que ya ha superado la fase de consulta pública y que tendrá que contar con una ley específica por ser de nueva creación, el Ejecutivo pretende lograr un consumo «más sostenible» dando prioridad a productos reutilizables.

Además, se eliminará la bonificación en el IVA de las bebidas con azúcares o edulcorantes añadidos, de manera que dejarán de estar gravados con el tipo reducido (10 %) para pasar al general (21 %), una medida que incrementará en 340 millones la recaudación en 2021.

Junto a estos cambios, Hacienda cuantifica otras modificaciones de la fiscalidad directa e indirecta que no detalla.

Así, los cambios en la fiscalidad medioambiental que «buscan proteger el medioambiente» ingresarán 1.311 millones en 2021.

El borrador presupuestario no indica en qué consisten esas medidas, aunque el fallido presupuesto de 2019 enmarcaba como fiscalidad verde un aumento en 670 millones la recaudación gracias a la equiparación de la fiscalidad del diésel con la de la gasolina.

Hacienda también ha sacado este año a consulta pública la posibilidad de poner una tasa a los billetes de avión, aunque el proyecto está aún en una fase temprana que no hace prever que pueda entrar en vigor a principios de 2021.

«Una serie de medidas» en la imposición directa permitirán «reforzar la progresividad del sistema impositivo» con una recaudación adicional de 550 millones en 2021, lo que podría estar relacionado con el acuerdo de los partidos de Gobierno para incrementar el IRPF a las rentas altas.

Otra «serie de medidas», en este caso en imposición indirecta (en la que se incluyen el IVA o los impuestos especiales), se relacionan con la «equidad» y prevén ingresar 1.509 millones adicionales en 2021.

Junto a ello, el Gobierno cifra el impacto de las anunciadas medidas para combatir el fraude fiscal: la limitación de los pagos en efectivo (218 millones), la rebaja del umbral para figurar en la lista de morosos (110 millones) y la adopción de prácticas internacionales en la lucha contra el fraude (500 millones).

Por lo que respecta a 2021, el Gobierno prevé incrementos adicionales de recaudación por el IVA de las bebidas azucaradas (60 millones), fiscalidad verde (50 millones) e imposición directa (1.998 millones), imposición indirecta (215 millones).