El conseller de Educación, Josep Bargalló. | Andreu Dalmau

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El Departamento de Educación, aconsejado por el de Salud, ha decidido que el 8 de enero, viernes, se considere festivo a efectos escolares en Cataluña y las clases se reanuden el día 11, para alejar lo máximo posible el regreso a las aulas de los encuentros familiares de las fiestas navideñas.

El Departamento de Educación ya ha comunicado esta decisión a los sindicatos de docentes y también la ha valorado el conseller de Educación, Josep Bargalló, en una rueda de prensa telemática que ha realizado junto con la consellera de Salud, Alba Vergés.

«Es una medida preventiva que tiene que facilitar que los hipotéticos contagios durante las vacaciones de Navidad y hasta el día de Reyes lleguen a la escuela en la mínima expresión posible; que afecte de la forma más insignificante posible a los grupos estables de las escuelas», ha remarcado Bargalló.

El conseller ha indicado que esta decisión, que se ha adoptado a petición de la comunidad educativa, siguiendo las recomendaciones de la Comisión Europea y del Departamento de Salud, comportará «una reducción de riesgos y menos confinamientos» en enero.

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El calendario escolar actual indicaba que los alumnos de primaria y secundaria de Cataluña tenían que regresar a las aulas el 8 de enero, viernes, pero con esta decisión no lo tendrán que hacer hasta el día 11, lo que supondrá cinco días después de la celebración del Día de Reyes en que es habitual que las familias tengan contacto con los menores para llevarles los regalos, lo que, según Salud, incrementará el riesgo de contagios.

Por eso, los epidemiólogos han recomendado que haya más días de distancia entre los encuentros familiares de estos días festivos y la vuelta a la escuela.

Preguntado por si la fecha de vuelta al colegio se podría posponer aún más en el caso de que los datos epidemiológicos fueran peores, Bargalló ha afirmado que a día de hoy «la decisión es ésta, pero tenemos suficiente experiencia para decir que, con cambios de datos, cambios de decisiones».

En este sentido, ha dicho que si se llegara al día 11 de enero con datos de la pandemia que llevaran al Gobierno, a la Generalitat y a las instituciones europeas a decisiones «más restrictivas, éstas afectarían a la escuela».

Eso sí, el conseller ha dejado claro que «la escuela se mantendrá abierta siempre y, en el caso más restrictivo de todos, mantendrá los servicios esenciales».