El portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique. | MARISCAL

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El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha esquivado este lunes una condena explícita de los disturbios contra la prisión del rapero Pablo Hasél alegando que se ha abierto al respecto «un falso debate» y que «todo el mundo» ve mal la violencia, y se ha ratificado en sus tuits.

En una jornada en la que Podemos Andalucía y Podemos Euskadi sí expresaban su rechazo a la violencia que se ha sucedido en las calles en los últimos seis días, Echenique se ha reafirmado en el apoyo a los «jóvenes antifascistas pidiendo justicia y libertad de expresión en las calles» que expresó cuando habían comenzado las primeras quemas de contenedores.

Según ha precisado, él no escribe «en caliente» en las redes sociales sino que piensa «mucho» lo que dice en cada momento y ese mensaje lo puso -ha relatado- porque «se estaba criminalizando a manifestantes, la mayoría de ellos pacíficos», y sentía que era necesario que algún responsable político «defendiese» sus demandas.

«Hay causas importantes de falta de normalidad democrática que son las que empujan a muchos jóvenes a manifestarse en las calles», ha añadido Echenique, que denuncia que el «falso debate» sobre la violencia esconde la discusión sobre la libertad de expresión o las condiciones de vida de los jóvenes españoles.

Al respecto, el secretario de Organización del PSOE, el ministro José Luis Ábalos, ha subrayado que Unidas Podemos es responsable de sus palabras y sus silencios y ha considerado normal que día a día se perciban con mayor claridad las diferencias entre los socios del Gobierno al ser partidos distintos.

Al recordarle las declaraciones de Echenique y el silencio de Podemos a la hora de condenar la violencia, ha señalado que cada partido entiende la realidad de una forma, prepara sus estrategias y difunde sus mensajes de acuerdo a como cree conveniente. «Son plenamente conscientes de sus palabras y de sus silencios, de sus acciones y omisiones», ha añadido.

También el alcalde de València, Joan Ribó, que denunció el exceso de la actuación policial contra las protestas por el encarcelamiento del rapero, ha mantenido sus palabras. «Creo que la actuación de la Policía debe ser proporcionada a la situación, y decir eso no implica ni pensar como el señor Hasel ni defenderlo porque a mí ni me resulta excesivamente amable ni excesivamente empático», ha apuntado el regidor valenciano.

Sí ha condenado la violencia el lehendakari, Iñigo Urkullu, que ha calificado de una «expresión de brutalidad y destrucción que denigra el sentido de la dignidad humana» los incidentes de ayer tras una manifestación en Bilbao. Y los partidos de la oposición han vuelto a reprochar al Gobierno que no se condene en su seno de forma unánime la violencia.

El portavoz del Comité de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, ha dicho que en su partido no aceptan que haya dos gobiernos y que una parte de él, en referencia a Unidas Podemos, aliente la violencia por la detención del rapero Pablo Hasel, por lo que hace responsable a todo el Ejecutivo de los incidentes.

Desde Ciudadanos, su portavoz, Melisa Rodríguez, ha cargado contra el Gobierno por «avalar» y dar la potestad de decidir a los antisistema y violentos «por encima de los derechos de todos los españoles» y le ha recriminado que no haya condenado «como debía» los altercados de Cataluña y otras ciudades.

También cree el portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, que Podemos «legitima la violencia» y a los delincuentes y busca con la reforma de los delitos de expresión «exonerar a todos aquellos que son cercanos». El PP ha acusado a los de Pablo Iglesias de colocarse «del lado de los delincuentes», como en el caso de Hasel, «porque son de su cuerda ideológica».

En la misma línea, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha dicho que los partidos que rechazan la violencia, es decir, «PP, PSOE, Ciudadanos y Vox» (omitiendo así a Podemos), tienen que «condenar las algaradas», porque son los que quieren «vivir en un país con pluralidad, con diferencias pero unidos, con respeto y entendimiento».

Decenas de personas se han concentrado este lunes a las puertas de la Ciudad de Justicia de Barcelona para expresar su apoyo a los detenidos en las protestas por el encarcelamiento del rapero y exigir que queden en libertad los últimos arrestados por los disturbios, en una jornada en la que no se descartan nuevas protestas.