El presidente Sánchez, en una imagen de archivo en el Congreso de los Diputados. | Efe

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciará en el debate sobre el estado de la nación que comienza este martes medidas sociales y económicas «muy ambiciosas» dirigidas especialmente a las clases medias y trabajadoras y con las que espera remontar y cohesionar al Ejecutivo de coalición. Después de las diferencias evidenciadas entre el PSOE y Unidas Podemos a cuenta de la intención de aumentar el gasto militar, Sánchez pretende dejar patente en su primer debate de este tipo como presidente que ese incremento es necesario pero que no es incompatible con seguir aprobando iniciativas para proteger a quienes más lo necesitan. A ello irán dirigidas las medidas que, sin ninguna concreción, ha avanzado la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, que estarán presentes en la intervención con la que Sánchez abrirá en el Congreso un debate que llevaba siete años sin celebrarse y que ha dicho que representarán a todo el Gobierno.

Fuentes de Moncloa han asegurado que serán propuestas «de mucho calado y muy ambiciosas», unas de carácter coyuntural y otras estructurales, con el objetivo de «proteger, proteger y proteger» a quienes más lo necesitan. Pero a la vez afirman que servirán para fortalecer al Gobierno de coalición ya que serán iniciativas cuyos beneficios serán evidentes. «Vamos a salir fuertes de este debate y vamos a dar profundidad a la legislatura», recalcan las fuentes gubernamentales para dejar claro que aún resta año y medio para las elecciones generales y todavía se pueden hacer muchas cosas para seguir reforzando derechos y libertades. Al preguntarle a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, por la posibilidad de que haya un giro social en el discurso de Sánchez se ha limitado a responder que «estará a la altura de las circunstancias y dará el discurso que tenga que dar».

Javier Sánchez, portavoz de Podemos, ha advertido sin embargo que si su socio no «corrige el rumbo» adoptando medidas para proteger a la ciudadanía y no se reflejan de manera inmediata y en los próximos presupuestos, «pueden ser los últimos de este gobierno de coalición». La portavoz de la dirección federal de Izquierda Unida, Sira Rego, ha confiado en que el presidente del Gobierno haga propuestas «útiles para el conjunto del país, con sello social». Desde la parte socialista se abunda en esa tarea social, se resta importancia a los avisos de Podemos y se insiste en que las medidas que anuncie Sánchez serán compartidas por todos. El Gobierno afronta por tanto el debate como un revulsivo tras reveses como el provocado por las elecciones andaluzas y, según ha dicho Isabel Rodríguez, «con muchas ganas» para dar respuesta a la «situación excepcional» que atraviesa el país tras la pandemia de coronavirus y la guerra en Ucrania.

El Ejecutivo pretende exhibir su gestión hasta ahora, confrontarla con lo que hizo el PP cuando gobernaba y tuvo que afrontar otras crisis, y garantizar una hoja de ruta hasta el final de la legislatura. Para ello hará una llamada a la unidad pese a ser consciente de que el PP va a dibujar un panorama catastrofista pero sin datos que lo avalen. El líder de este partido, Alberto Núñez Feijóo, estará sentado en el hemiciclo por su condición de senador pero no podrá intervenir, y será su secretaria general y portavoz del grupo popular, Cuca Gamarra, la que protagonice el cara a cara con Sánchez. Un cara a cara en el que estará presente la renovación pendiente del Consejo General del Poder Judicial y ante la que el PP ha ofrecido este lunes llevarla a cabo con la normativa en vigor pero con dos condiciones: la retirada antes del jueves de la reforma del Consejo para renovar el Tribunal Constitucional (TC) y pactar al tiempo una proposición de ley para despolitizar la justicia.

Entre los socios de investidura, ERC ha avanzado que pedirá la reforma fiscal prometida antes de final diciembre y ha avisado al Gobierno de que «la gente no quiere cheques». Fuentes de la formación republicana en el Congreso han señalado a Efe que su portavoz, Gabriel Rufián, hará un discurso «crítico pero constructivo» para que el Gobierno socialista haga una «reflexión» sobre sus políticas económicas y «baje a la realidad». «Es una oportunidad para que Sánchez vuelva a la izquierda y aterrice con sus políticas», han señalado. Por su parte, el portavoz nacional de Vox, Jorge Buxadé, ha anunciado que su grupo presentará una propuesta de resolución de «rechazo total», una especie de «enmienda a la totalidad» a las iniciativas que plantee el presidente del Gobierno. Ciudadanos ha adelantado que llevará al debate una propuesta para que España no distinga entre nacionalidades y regiones, y para que todos los ciudadanos sean iguales independientemente del territorio donde vivan.