El presidente andaluz, Juanma Moreno. | Efe

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El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha hecho un llamamiento a la «serenidad, la calma» y la convivencia «desde el respeto mutuo» tras el supuesto atentado yihadista ocurrido en Algeciras (Cádiz), en el que murió un sacristán y cuatro personas resultaron heridas, que ha calificado de «hecho puntual». Moreno ha pedido este jueves, en declaraciones a los periodistas, que «nadie saque conclusiones que pueden ser erróneas» y que «nadie generalice hacia ningún colectivo ni étnico ni religioso» porque «esto es un hecho puntual lamentable» del que «no se pueden sacar conclusiones generales».

Ha recordado que en Algeciras conviven 129 nacionalidades y en otros puntos de Andalucía, como Almería y Huelva, también residen personas de diversas procedencias sin que se haya producido hasta la fecha «ningún altercado grave». El jefe del Ejecutivo andaluz se ha mostrado «muy apenado» por el ataque, a la vez que «muy sorprendido» porque en la comunidad no están «acostumbrados a este tipo de actos terroristas», y ha confiado en que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado «arrojen luz» a todas las «dudas» para que la sociedad esté «mucho más serena».

En cuanto al presunto agresor, un joven marroquí de 25 años, ha dicho que es necesario aclarar si tiene relación con algún grupo yihadista, si «ha sido radicalizado aquí o venía radicalizado» y si estaba pendiente de expulsión del país, una información que ha asegurado que «nadie» le confirma. A este respecto, ha dicho que el Ministerio del Interior debe resolver las «muchas dudas» respecto a este ataque, del que solo dispone de «poca información» a través de fuentes policiales.

El titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, se desplazará a Algeciras tras suspender su agenda en Estocolmo, por lo que Moreno espera disponer de «la mayor información posible». Moreno ha indicado que el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, le ha comentado que «todas las hipótesis están ahora mismo abiertas» y los investigadores están analizando los dispositivos informáticos que tenía el agresor y si tenía vinculación con algún grupo, aunque «parece» un acto «individual».

El fallecido es el sacristán de la iglesia de La Palma de Algeciras Diego Valencia, quien fue atacado con un machete por el marroquí Yasin Kanza, que hirió de gravedad al vicario salesiano Antonio Rodríguez en la capilla de San Isidro de la misma localidad. El sacristán era «una persona muy querida» en Algeciras, ciudad que «está de luto», ha dicho Moreno a los periodistas, antes de inaugurar en la capital malagueña OXO Museo del Videojuego.