La propuesta Carrasco no dejó indiferente a nadie y pilló por sorpresa tanto a los espectadores como a los colaboradores. «Sé que durante las emisiones de estas semanas de la serie documental, ha sido mucha la información que todos habéis tenido que digerir, ver y asimilar», indicaba Rocío. Ahora, considera que ha llegado el momento de acudir al plató e intervenir en directo para «aclarar» las dudas que hayan surgido sobre su testimonio.
«Me alegro de que quieras dar la cara, me parece muy generoso por tu parte que quieras seguir resolviendo dudas y dando respuestas», indicaba la presentadora del formato, Carlota Corredera. Eso sí, la pausa del documental será temporal ya que como afirmó la propia Rocío «luego retomamos ¿Eh?».
El programa de Rocío Carrasco ha superado todas las espectativas y ha abierto un debate público sobre la violencia machista. En la emisión de los capítulos 0 y 1 la minisitra de Igualdad, Irene Montero, quiso mandar un mensaje de apoyo a la hija de Pedro Carrasco: «El testimonio de Rocio Carrasco es el de una víctima de violencia de género. Cuando una mujer denuncia públicamente la violencia puede ser cuestionada o ridiculizada. Por eso es importante el apoyo».
Además, la semana posterior a la emisión del programa se produjo un aumento de las consultas a los servicios de atención a víctimas de violencia machista 016, tanto mediante llamadas como por correos electrónicos y Whatsapp, tal y como informó el Ministerio de Igualdad.
Por su parte Rocío Flores, hija de Rocío Carrasco y Antonio David, reapareció el pasado viernes en televisión en el programa de Ana Rosa Quintana para comentar Supervivientes, el reality en el que participa Olga Moreno, mujer de su padre y a quien considera una «segunda madre». Por el momento, no se ha pronunciado sobre el documental.
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