James Rhodes, en una imagen de archivo. | Europa Press

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James Rhodes ha anunciado este martes que ha contraído la COVID: «Bueno, mi Navidad está jodida», ha resumido en redes sociales el pianista, que tenía previsto viajar a Barcelona, pero que ahora se encuentra «en la cama con un dolor que te cagas» y que se siente «absolutamente terrible», asegura. En una publicación en Instagram acompañada de la imagen de un test de antígenos en el que pueden verse las dos rayas que indican que se ha contraído la infección, Rhodes relata cómo pensaba que solo tenía un resfriado, con síntomas de secreción nasal, dolor de cabeza, tos y sensación de debilidad. «Un resfriado típico. Pero aparentemente (según los médicos) los síntomas de ómicron a menudo imitan un resfriado. Hice dos pruebas ayer y ambas resultaron negativas y hoy, boom. De Guatemala a guatepeor. Síntomas mucho más dolorosos», añade.

Por ello, el artista inglés afincado en España recomienda a quien sienta que tiene un resfriado: «Hazte una prueba antes de pasar tiempo con familiares y amigos. Por favor. Es mejor cancelar una fiesta que cancelar una vida». Debido a esta infección que le ha pillado en plena sexta ola y mientras se multiplican los contagios, Rhodes explica que ahora estará «sin familia por Navidad y Reyes». «Pero siento que aquí en España tengo una familia adoptiva siempre cerca», por lo que da «gracias de corazón».

Su publicación ha recibido numerosas respuestas de ánimo, entre ellas la de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que le asegura: «No estarás solo, somos miles los que te queremos. Cuidate y descansa», o la del presentador Risto Mejide, que le dice: «Tranquilo que la vacuna hará su trabajo». Rhodes remarca que este año se ha casado «con la mujer más increíble» y que ha vivido otros hitos también importantes para él: «Entró en vigor una ley de protección infantil que convirtió a España en el país número uno del mundo en seguridad infantil, recibí mi pasaporte español, publiqué un libro, di algunos conciertos en lugares increíbles y vencí una depresión que, por momentos, amenazaba con abrumarme por completo». Por todo ello, cree que acaba «un año de Puta madre» y asegura que está «agradecido por mucho. Mucho» y desea «todo el mejor fin de año posible».