Un equipo de investigación se encontraba el pasado agosto documentando la biodiversidad en una zona cercana al río Tijamuchi (Bolivia). Durante la exploración y en medio del rio aparecieron unos animales poco comunes y siempre difíciles de encontrar: unos delfines bolivianos asomaban la cabeza en medio del río.
Explica uno de los biólogos de la expedición que tan solo verlos ya fue algo extraordinario y que por ello empezaron a tomar fotografías de lo que estaba ocurriendo. Fue más tarde, revisando las imágenes, cuando uno de los investigadores se percató de lo que estaba ocurriendo.
Los delfines portaban en la boca una anaconda. Los investigadores publicaron las imágenes en la revista Ecology. Aunque estos animales son conocidos por ser juguetones, se ha creado un debate alrededor de esta imagen y no se tiene del todo claro que hacían realmente los delfines. ¿Un juego o depredación? De momento ninguna teoría se ha impuesto.
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