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La Audiencia de Palma juzgará la próxima semana a un hombre acusado de abusar sexualmente de su hija cuando ella tenía 15 años en su domicilio de Palma, para quien la Fiscalía pide una condena de 10 años prisión así como la prohibición de acercarse o comunicarse con la joven.

Los hechos por los que será juzgado ocurrieron en abril de 2012 cuando el hombre, «movido por un ánimo libidinoso y aprovechando su posición de superioridad derivada de la relación paterno-filial», realizó tocamientos en los genitales a su hija con la excusa de darle un masaje en las piernas mientras estaban los dos en el sofá de su vivienda familiar, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía.

Como consecuencia de dicho episodio, la menor de edad sufrió transtorno de estrés postraumático que se manifestó en forma de ansiedad y depresión, alteración del ritmo de sueño y vigilia, pesadillas y reexperimentación del trauma en forma de imágenes recurrentes.

El fiscal acusa al padre de abuso sexual y pide una condena de 10 años así como la prohibición de comunicarse o acercarse a su hija durante el mismo tiempo, y que la indemnice con 12.000 euros por el perjuicio moral y psicológico sufrido.

Está previsto que el juicio se celebre ante la sección primera de la Audiencia de Palma el próximo lunes.