Comparecencia de Laura Camargo. | A Balears Podem

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La aprobación definitiva de la creación de la nueva Oficina de Lucha contra la Corrupción de Balears «va viento en popa», ha asegurado este miércoles la portavoz de Podemos en el Parlament, Laura Camargo, mientras que el de Més, David Abril, ha anunciado que será una realidad el próximo año.

Tras la reunión de la Junta de Portavoces celebrada este miércoles, todos los grupos han destacado el buen ambiente de trabajo entre los partidos políticos, los que apoyan al Govern y la oposición, con ocasión de la primera reunión la mañana de este miércoles de la comisión que debate las enmiendas de la futura oficina.

El coordinador de la ponencia, David Abril, ha comentado a los periodistas el «buen clima» existente, también desde la conciencia de todos los partidos de que es necesario poner fin a «la lacra de la corrupción y, particularmente, en el caso de esta comunidad autónoma».

La portavoz de Podemos ha cargado contra el PP tras la reunión, afirmando que el código ético de los populares ha quedado para poco más que para «envolver chorizo» tras los últimos casos destapados en Palma, además de sugerir el traslado de su sede a «a la carretera de Sóller», en referencia a la prisión.

La próxima semana se reunirá la ponencia de nuevo y a finales de noviembre el pleno del Parlament podría aprobar definitivamente esta oficina, que se pondría en marcha a comienzos del nuevo año.

Queda por concretar el lugar donde se ubicará la nueva oficina, así como la elección de su director o directora y el tiempo del mandato.

Con la abstención del PP y el voto contrario de Podemos, este miércoles se ha aprobado una enmienda para que la ubicación de la oficina «respete los principios de transparencia y confidencialidad» que marca la ley, ha explicado Abril.

Esto supondría que la oficina no se abrirá en la propia sede del Parlament balear, como pretendía Podemos.

Aún no se ha concretado qué presupuesto tendrá este nuevo organismo, aunque Abril se ha mostrado convencido de que «cualquier cantidad será pequeña» en comparación con «la millonada que han costado los casos de corrupción» a los ciudadanos de Balears.

De hecho, una de las enmiendas defendidas por Més es que la memoria de la oficina «haga un ejercicio de pedagogía» respecto a las cantidades que se reclamarán por los asuntos de corrupción y también las que se ahorrarán gracias a su trabajo.