Imagen del momento en el que uno de los detenidos en Inca sale de su domicilio.

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El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz cree que uno de los cuatro yihadistas detenidos en Mallorca por formar parte de una célula del Dáesh «habría planeado» una «matanza» en la plaza del Ajuntament d'Inca y «habría manifestado su intención de convertirse en mártir».

Pedraz envía a prisión provisional, comunicada y sin fianza, a los cuatro arrestados por el delito de integración terrorista, y señala en el auto que uno de ellos podría haber planeado «acciones violentas» como la citada matanza que, presuntamente, consistía en apuñalar a los viandantes.

Lo concluye así el juez a tenor de las «observaciones telefónicas, vigilancias y seguimientos», así como del material intervenido a raíz de la investigación, que «aporta novedades sobre el grado de profesionalización del grupo en lo tocante a la grabación y distribución de materiales videográficos a través de internet».

Los cuatro detenidos, señala Pedraz en el auto, eran miembros de un grupo que «difundía propaganda y adoctrinaba a nuevos miembros terroristas y elaboraba materiales audiovisuales idóneos para ser empleados en un proceso de captación de yihadistas».

Todos ellos formaban parte de una célula con ramificaciones internacionales, contra la que se dirigió una compleja operación policial el pasado miércoles en la que también fueron detenidas dos personas en Alemania y Reino Unido.

El arrestado en Reino Unido era el creador del grupo del que formaban parte los detenidos, el imán y líder salafista Tarik Chadlioui, «que recluta a personas para organizar células yihadistas y que se ha desplazado en varias ocasiones desde el extranjero a Mallorca para poner en marcha la estructura terrorista».

Según el Ministerio del Interior, el predicador salafista, cuyo discurso público era muy conocido por los servicios policiales y de inteligencia europeos, se dedicaba en su vertiente más privada a la captación de combatientes y la recaudación de fondos para Siria, pero las medidas de seguridad que adoptaba y sus cambios constantes de residencia dificultaban mucho su detención.

Radicalización

El juez señala en el auto que tres de los arrestados en Mallorca participaron como «actores» en un vídeo llamado «Toufiq se fue a Siria», que se publicó en un canal con más de 12.000 suscriptores y en el que se muestra el proceso de radicalización de un joven musulmán en España que decidió combatir en Siria.

«Más tarde se sigue al adoctrinamiento y radicalización de sus propios miembros y reclutamiento de otros nuevos, llegando a un punto de justificación de la violencia para la imposición de la 'sharia' (ley islámica), e incluso el planteamiento por uno de los detenidos de planear un atentado», continúa el magistrado.

Pedraz identifica a uno de ellos, Abderrahman Farid, como el «líder espiritual» de los cuatro, que dirigía y convocaba sus reuniones, en las que se adoctrinaba a los asistentes y se buscaba reclutar a nuevos integrantes para incorporarlos al grupo.

Otro, Azzouz Azdad, se dedicaba al adoctrinamiento y la captación de menores para la yihad y poseía una «gran cantidad de materiales del Estado Islámico sobre entrenamiento terrorista de niños y ejecuciones llevadas a cabo por menores».

Abdelkader Mahmoudi era el que habría planeado el ataque en Inca apuñalando a los viandantes. Había manifestado su intención de convertirse en mártir.

El último de los arrestados es Ali Mtioui, que habría publicado contenidos en su perfil de Facebook que llamaban a hacer la «yihad».

En el citado auto el juez les envía a prisión teniendo en cuenta «la gravedad del delito» y el riesgo de fuga de los arrestados y recuerda que la investigación está todavía secreta e inacabada.