Martí March, en su despacho de la Conselleria d'Educació. | Joan Torres

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El Govern balear ha considerado este viernes que las críticas del Ministerio de Educación a que en las islas se pueda obtener el título de ESO con dos asignaturas suspendidas son «un nuevo ejemplo de improvisación» del departamento de Méndez de Vigo, que elaboró el decreto en el que se basa la norma autonómica.

La Conselleria de Educación del archipiélago explica en un comunicado que un real decreto del pasado 2 de junio establece que los estudiantes que tengan suspendidas dos asignaturas, siempre que no sean al tiempo Lengua y Literatura (de cualquiera de los idiomas cooficiales) y Matemáticas, podrán obtener el título de ESO si sus profesores entienden que han alcanzado los objetivos generales.

A partir de esta norma, el departamento autonómico aprobó una resolución propia en la que precisaba que dos tercios de los profesores del alumno tenían que avalar la concesión del título, explica el Govern balear en un comunicado en el que recuerda que desde hace 10 años se puede pasar la ESO con dos suspendidas y que incluso hasta el pasado curso podía ser tres.

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La diferencia de criterio entre el Ministerio y la Conselleria de Educación estriba en que el órgano estatal entiende que para la concesión del título los alumnos con asignaturas suspendidas tienen que intentar superarlas en los exámenes de septiembre, mientras que el departamento autonómico considera que, como igualmente podrán obtener la titulación, esa decisión se puede adoptar tras los exámenes de junio y debe quedar en manos de sus profesores.

«El Ministerio en su nueva norma no especifica que el alumnado con dos asignaturas suspendidas esté obligado a presentarse a las pruebas extraordinarias de septiembre», indica el departamento de Educación de Baleares, cuyo criterio ha sido similar al de los gobiernos regionales de Aragón, Canarias, Extremadura y Andalucía.

El Govern balear reprocha además al departamento que dirige Íñigo Méndez de Vigo que el que critique su interpretación de la norma «semanas después de que hayan acabado los procesos de evaluación», algo que denota «improvisación», sostiene.

«Sorprende que el Ministerio hable continuamente de evaluación competencial y ahora afirme que su norma restringe la obtención del título de ESO a un simple recuento de materias aprobadas o suspendidas», censura la Conselleria de Educación, que considera también injustificado que se apele a la posible bajada de la media para obtener becas cuando «el impacto de dos notas suspendidas» sobre 40 asignaturas «es muy poco significativo».