Según fuentes oficiales, el joven, de origen paraguayo, fue detectado por una unidad de radar e interceptado en las inmediaciones de la rotonda del Conservatori, concretamente en la calle Alfons el Magnànim (antigua Capitán Salom), por varios efectivos policiales de la Unidad Motorizada Pesada. Una vez practicada la correspondiente prueba de alcoholemia, el chico arrojó un resultado de 0,08.
La vía urbana en la que se produjo el exceso de velocidad tiene un límite máximo de 50 kilómetros por hora. Al superar en 69 kilómetros la velocidad máxima se procedió a su arresto por un presunto delito contra la seguridad vial.
Tras pasar unas horas en los calabozos de Sant Ferran, el chico fue puesto en libertad con cargos. Acto seguido, se le comunicó la citación para la celebración de un juicio rápido.
El joven, que conducía como si se tratara del circuito de Montmeló por las calles de Palma, viajaba en el vehículo con otras tres personas en el interior.
Caso similar
El pasado 5 de diciembre, en las inmediaciones de la carretera de Sóller, justo en la recta de la cárcel, el radar ya 'cazó' a otro conductor con un claro exceso de velocidad. En esa ocasión, el titular del vehículo circulaba a 216 kilómetros por hora. Lo más curioso de ese caso fue que, una vez sancionado, el joven solicitó vía Facebook a la Policía Local de Palma que le enviara la foto para colgarla en sus redes sociales.
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