Tiempos inciertos. La imagen es de este viernes, del inicio oficioso de la temporada de compras navideñas. Una mujer habla por teléfono ante un comercio con descuentos. El sector del comercio advierte desde hace tiempo que atraviesa un momento difícil. Los partidos políticos han propuesto diferentes iniciativas y el Govern ya trabaja en algunas que, según se explica, serán financiadas con fondos europeos.

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La Conselleria de Transició Energètica i Sectors Productius, concretamente su Direcció General de Comerç, ha decidido rescatar y reformular un proyecto anterior a la pandemia y que ahora se puede beneficiar de los fondos estatales previstos para afrontar la crisis económica que ha provocado la pandemia por el coronavirus: la Tarjeta Island Pass.

Es uno de los proyectos en los que trabaja el Ejecutivo balear para reactivar y dinamizar el comercio. Algunos son a corto plazo y pensados para esta temporada navideña que abrió este viernes el Black Friday. Otros requerirán más tiempo pero tienen algo en común: que pueden concretarse a través del mundo digital o virtual, desde tarjetas digitales a aplicaciones electrónicas. Hay tres consellerias relacionadas con esta materia: la de Transició Energètica (con rango de Vicepresidencia), la de Administracions Públiques y la de Turisme i Treball. Las tres aportan sus proyectos al plan de reactivación.

La diputada socialista Pilar Sansó, que fue responsable de comercio en la anterior legislatura, dijo a este diario que ya había pactado con el Ejecutivo una serie de actuaciones inmediatas que empezarían con una campaña específica pero, también, con la presentación de una tarjeta virtual para jóvenes. El pasado jueves, además, el Parlament instó al Govern a impulsar un proyecto que llamó Shopping Islands.

Tarjeta Ciudadana Balear

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El director general de Comerç, Miquel Àngel Piñol, afirma que eso es factible y que ya está trabajando en un proyecto electrónico que podría ser una aplicación de móvil: la Tarjeta Island Pass.

Según Piñol «pretende ser una suerte de Tarjeta Ciudadana Autonómica, tanto para residentes como para turistas que integraría compras y eventos e itinerarios culturales». También podría llegar a aplicarse en el transporte público.

En realidad, comentó, es algo en lo que ya se trabajaba antes de la pandemia y que se había centrado en turistas. «No es que hayamos inventado nada, es algo que funciona en otras ciudades, desde New York a Madrid», dijo.

De momento serán los ayuntamientos y la asociaciones comerciales quienes, junto al Govern, definirán las medidas para este año.

El sector comercial apremia.