El presidente del Parlament, Thomàs, durante el pleno.

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El último pleno del año en el Parlament balear –el último del año de la pandemia y marcado por las limitaciones de aforo de esta– vino marcado por el rifirrafe entre los partidos por las medidas que ha ido tomando el Govern.

Los momentos de mayor crispación llegaron por las intervenciones del PP y de Vox. Ciudadanos (Cs) y el PI, que expresaron algunas diferencias, buscaron el lado positivo y evitaron la crítica directa.

La presidenta Armengol tomó nota: reprochó la actuación de los primeros y agradeció la de los segundos. El Parlament visualiza desde hace días (sobre todo desde la aprobación de los Presupuestos) un nuevo escenario político más allá de la mayoría entre los partidos que dan apoyo al Ejecutivo y el resto. El PP y Vox pugnan en estos momentos por liderar la oposición. También en el debate sobre la COVID-19.

Armengol aprovechó sus respuestas para ir preparando a la ciudadanía sobre lo que pasará en los próximos días: dejó claro que aunque hasta el lunes no se revisarán las medidas que regirán en Nochebuena y Navidad, todo apunta a que éstas continuarán para Nochevieja y quizá hasta después de Reyes.

Restricciones en Nochevieja

«La proyección sigue al alza y lo lógico es pensar que el día 28 Mallorca se mantendrá en nivel 4», aseguró. Armengol recalcó que el Govern toma «decisiones contundentes pesando en la salud de los ciudadanos», razón por la que Mallorca está en «un nivel de riesgo 4 agravado» tras una época «de relajación y porque los contagios se han disparado, lo que significa «más enfermos y más personas que pueden acabar en situación muy complicada o incluso en muerte».

La ‘popular’ Tania Marí enfureció a la consellera de Salut, Patricia Gómez, y eso llevó al momento más tenso. Fue cuando le preguntó por los controles de llegada a las Islas y afirmó que mientras la mayoría cumplía «la presidenta se iba de copas» y las hijas de una directora general «montaban una macrofiesta e ideaban coartadas por si venía la policía». Aludía al episodio del bar Hat y a una fiesta en julio a la que asistieron 45 personas cuando el límite era 70. Según Marí, «la actitud irresponsable del Govern da alas al negacionismo».

La respuesta de la consellera fue: «¿Saben de lo que me estoy dando cuenta? Pues de que tenemos una oposición indigna y miserable. La oposición del PP es indigna y miserable».

El portavoz ‘popular’, Gabriel Company pidió la palabra para que retirara esa expresión, lo que no hizo. «Son hechos contrastados», aseguró Company. En su pregunta posterior a la presidenta, insistió en que el Govern daba «mal ejemplo» y le instó a tomar otras medidas. «Me guío por los expertos, no por lo que usted opina». Jorge Campos (Vox) insistió en lo de las copas, criticó las restricciones y le acusó de aprovechar la pandemia para imponer su sueño totalitario».

Armengol, en su intervención final, criticó el tono de PP y Vox y alabó el discurso «constructivo del resto». Y precisó: «Trabajamos codo con codo con quienes quieren aportar soluciones».

Thomàs, el nuevo reglamento y un deseo para 2021

El presidente del Parlament, Vicenç Thomàs, intervino después de que el pleno aprobara el nuevo reglamento de la Cámara. «El trabajo sigue y aquí estaremos para seguir luchando contra la pandemia y fijando las bases de lo que queremos que sea Balears», dijo. Y confió en que «el próximo año, al mirar atrás, nos encontremos una pesadilla ya superada»