La vivienda de segunda mano lleva experimentando un crecimiento sostenido de los precios desde el año 2015, según los estudios del portal inmobiliario Fotocasa. La media española en este sector descendió un 0,8 % el pasado mes de enero. | Jaume Gual

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Baleares es la segunda comunidad autónoma con el precio de la vivienda de segunda mano más elevado de España. El Archipiélago alcanzó los 2.885 euros por metro cuadrado de media durante el pasado mes de enero, solo por detrás de la Comunidad de Madrid (3.137 euros por metro cuadrado). Así se desprende del informe publicado ayer por el portal inmobiliario Fotocasa, el cual revela un crecimiento interanual de los precios en Balears del 2,1 % mientras la media española iba experimentando un descenso de cerca del 1 %. Así, el precio medio de la vivienda usada en las Islas es un 52,5 % más alto que la media española, de 1.892 euros por metro cuadrado. Prácticamente, mil euros más.

Más vertiginosa resulta la comparativa si tomamos en consideración la comunidad con un precio más reducido: Castilla-La Mancha, con una media de 1.109 euros el metro cuadrado, un 160 % más barato que en el archipiélago balear. La vivienda usada en las Islas lleva desde 2015 experimentando un crecimiento interanual sostenido. Entre la veintena de municipios baleares analizados por el portal inmobiliario, el de Eivissa es el que presenta un precio más elevado: 5.043 euros por metro cuadrado.

Palma, por otro lado, es el séptimo municipio del listado con una media de 3.096 euros por metro cuadrado, lo que la sitúa por detrás de otros municipios como Sant Josep de sa Talaia (4.531 euros/m2), Santa Eulària des Riu (4.515 euros/m2), Calvià (4.399 euros/m2), Sant Antoni de Portmany (3.491 euros/m2) o Pollença (3.399 euros/m2). Así, el precio medio de la vivienda se sitúa en 317.611 euros. Eivissa encabeza el ránking con un precio medio de 542.163 euros. El precio medio en Palma es de 361.855 euros.

Según la directora de Estudios de Fotocasa, María Mateos, Baleares se situaría entre las regiones españolas más «tensionadas» en cuanto al alza de los precios, lo que las convierte en un factor de riesgo para el incremento del precio medio en el conjunto del Estado. «Nos encontramos un 36 % por debajo del precio máximo alcanzado en 2007 y es un factor que nos permite respirar con tranquilidad al saber que esto nos aleja todavía más de una burbuja», señala Mateos para subrayar que la tendencia al alza en comunidades como Madrid, Balears, Catalunya o País Vasco «podría conllevar incrementos y variaciones al alza en la vivienda». No obstante, matiza que «si el sector continúa canalizando la demanda y dando respuesta a este gran interés por comprar, el precio podrá mantenerse moderado».