El descenso en la natalidad es un grave problema con efectos económicos incluidos. | Irene Arango

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Balears entra de lleno en el llamado invierno demográfico, con la caída de la natalidad y el aumento de las muertes entre la población, pero en los seis primeros meses del año hay, además, una circunstancia especial que hace que salten las alarmas: por primera vez en décadas, en las Islas ha habido más defunciones que nacimientos. Se trata de datos que corresponden a los seis primeros meses del año, según los datos que ayer publicó el Instituto Nacional de Estadística, y que reflejan la siguiente ecuación: en ese periodo, nacieron 4.332 bebés y murieron 4.812 personas.

Eso significa que, en los seis primeros meses del año, la Comunitat habría perdido población. Son apenas 480 habitantes, pero la cifra es importante porque es la primera vez que eso pasa en años. Los porcentajes que ayer presentó el INE también son muy significativos: señalan que los nacimientos cayeron en las Islas un 4,04 % mientras que las defunciones subieron un 10,42 por ciento si se comparan los seis primeros meses de este año y los seis primeros meses del año anterior.

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La entrada en ese invierno demográfico es, además, especialmente acusada en las Islas ya que es la segunda comunidad, por detrás de La Rioja, que sufre una mayor caída en la natalidad. Si se comparan los datos del primer semestre de este año con el primero de 2016, el último que detalla el INE, la cifra se dispara ya que la caída de la natalidad se acerca al 20 %.

El INE ofrece datos de nacimientos hasta junio y de defunciones, hasta julio. Si se compara julio de este año con julio del año anterior, el acumulado de muertes ha subido un 11,43 % con respecto a hace un año. Es, también, una cifra muy superior a la media, que ha sido del 5,5 % en toda España, y una de las más altas entre las comunidades. Solo hay tres comunidades autónomas que presentan unos datos peores a los de Balears por lo que respecta al aumento en las muertes. Son Cantabria, donde los fallecimientos aumentaron un 23 % en ese periodo, Navarra, con un 15,69 por ciento, y Castilla y León, con un aumento del 11,99 %.