Imagen de una actuación policial. | Guardia Civil

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En los últimos años, ultras alemanes relacionados con organizaciones de ideología nazi han mantenido reuniones secretas en Mallorca, según han averiguado por los servicios policiales de Información. Algunos de estos radicales son afines a los conspiradores detenidos en Alemania por planear un golpe de Estado. Uno de ellos, que se había ocultado en la Isla, fue arrestado y pertenecía a la organización Reichsbürger, la misma que ahora pretendía tomar el poder por la fuerza en Alemania.

A mediados de marzo de 2019 la Guardia Civil de Palma detuvo a un nazi alemán que se escondió en Peguera tras fabricar una bomba en su país, a mediados de febrero. Michael Leopold Stiegler estaba siendo buscado intensamente por la policía de su país. El artefacto explosivo que colocó en la localidad bávara de Burglengenfeld, y que no llegó a explotar, contenía mercurio, lo que hubiese provocado una alta contaminación del área circundante. El detenido en Mallorca estaba considerado por las autoridades alemanas como «muy peligroso».

‘Ciudadanos del Reich’

Integrante del colectivo radical de extrema derecha Reichsbürger (‘ciudadanos del Reich’), se refugió en un chalet alquilado en Peguera para intentar pasar desapercibido entre turistas y residentes germanos en este núcleo turístico de Calvià. Fue arrestado, tal y como adelantó en exclusiva Ultima Hora, cuando se disponía a tirar la basura en la puerta de la vivienda que había alquilado. Los agentes llevaban días vigilándolo día y noche, sin que él lo sospechara. Fue la denominada ‘operación Huestes’, que se saldó con un sonoro éxito policial. En el registro la Guardia Civil utilizó perros por si el sospechoso almacenaba algún tipo de explosivos en su guarida. Ingresó en la prisión de Palma y después fue extraditado a su país, para ser juzgado por un delito de terrorismo.

Según explicó la Benemérita, el Reichsbürger «aúna diversas agrupaciones e individuos neonazis vinculados a la ultraderecha alemana, y que rechazan la legalidad de la República Federal Alemana, no reconociendo a las autoridades ni instituciones del actual estado alemán, negándose a pagar impuestos y a realizar tareas civiles, manteniendo una postura abiertamente contraria y de oposición al mismo».

Esta organización fue desmantelada el fin semana pasado tras una espectacular operación de la Policía alemana, que movilizó a miles de efectivos y decapitó la cúpula, compuesta por 25 dirigentes, entre los que destacaba el príncipe Heinrich XIII, un aristócrata de la Casa Reuss-Greiz, que estuvo emparentada con los Romanov, y que existe desde la Edad Media. Su carácter polémico lo hacían un habitual de los medios alemanes: agredió a un periodista y es conocido por sus discursos contra el Gobierno de su país y la UE. Su castillo en Turingia fue registrado, al igual que otras de sus propiedades, y el noble se veía a sí mismo como el próximo emperador alemán, aupado por el brazo armado de los Reichsbürger. El grupo, en total, lo forman más de 21.000 ultras distribuidos por todo el país. Algunos de ellos tienen armas de fuego, según ha acreditado la policía alemana.

Del 19 al 23 de mayo pasado, una finca de la Isla -cuya localización se mantuvo secreta- fue el escenario de una reunión de treinta destacados ultras del Reichsbürger, que publicitaron el encuentro en las redes sociales. El organizador de las jornadas fue Irfan Peci, un controvertido ideólogo de extrema derecha conocido por su discurso anti musulmán. Acudieron algunos políticos y expolíticos y en el orden del día se trataron asuntos del tipo «cómo salvar nuestra patria» o la forma de «cazar musulmanes». En Cala Rajada, las autoridades también tienen constancia de la presencia de un activo neonazi germano.