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Las agencias de viajes alertan del agotamiento de mercados tradicionales por los altos precios

Esperan un verano de récord con una caída del turismo hacia EE.UU.

Turistas paseando por Palma, en las inmediaciones de la catedral | Foto: miquel angel canellas serra

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La patronal de agencias de viajes de Balears, Aviba, alerta de que algunos de los principales mercados emisores de las Islas, como es el caso del alemán, presentan «síntomas de agotamiento» debido a la tendencia alcista de precios y pide una reflexión dentro del propio sector turístico balear. Aún así, el buen comportamiento de las reservas hace prever otro verano de récord con Francia, Italia, Escandinavia y Polonia como mercados emergentes y una caída de la demanda hacia Estados Unidos por el «efecto Trump»

Este verano se perfila como un punto de inflexión para el sector, según Pedro Fiol, presidente de la Agrupación Empresarial de Agencias de Viajes de Baleares (AVIBA). Aunque se espera otra campaña de récord, preocupa que algunos de los principales mercados emisores de Balears, como el alemán, empiezan a mostrar signos de agotamiento. «Este verano seguiremos creciendo en turistas transportados porque unos mercados compensan el déficit de otros», explica Fiol. «A muchos nos gustaría poder mantener estos precios alcistas, pero debemos plantearnos si seremos capaces de mantenerlos una temporada más»

La evolución del turismo revela un panorama dual. Por un lado, crece la demanda de visitantes dispuestos a pagar precios más altos por calidad. Por otro, explica el presidente de Aviba, emerge una oferta paralela, muchas veces ilegal, para los que no pueden permitirse pagar precios que se incrementan año tras año pero que no renuncian a sus vacaciones en Balears, aunque tengan que acortar la estancias. Todo ello hace que se mantenga la presión sobre un destino que no ha incrementado su capacidad de alojamiento. «En este caso, hablamos de turistas que vienen con menos dinero para gastar, sobre todo si se contraen las economías de sus países como es el caso de Alemania, lo que afecta, sobre todo, a la oferta complementaria. En Balears seguimos creciendo en pasajeros sin haber aumentado las plazas turísticas. Algo se nos está escapando», advierte.

Reservas

De cara a la campaña de verano, «las reservas están funcionando a buen ritmo», según Fiol. «La venta anticipada ya representa el 50% del volumen total en destinos como Mallorca, con un 40% adicional reservado entre dos y tres meses antes. Aun así, las ofertas de última hora siguen presentes, aunque con menor protagonismo (10 %)». El turismo de sol y playa continúa siendo el principal motor, con un 90% de las motivaciones de viaje, aunque crece la intención por conocer otras facetas del destino.

En cuanto a mercados, Alemania sigue liderando como emisor, aunque «lleva varios meses de caída respecto al año pasado», señala el presidente de AVIBA. Respecto al mercado británico, Fiol alude a una cierta contradicción: «Las agencias y el aeropuerto coincidimos en un aumento de pasajeros y volumen de negocio británico, aunque las estadísticas oficiales indican lo contrario».

Francia, Italia, Escandinavia y Polonia también ganan terreno, al igual que Estados Unidos, que sigue siendo uno de los principales emisores de larga distancia. No obstante, el contexto político está afectando: «A corto plazo, el impacto del ‘Efecto Trump’ no se ha notado, pero fuera del verano, todas las agencias coinciden en que la demanda hacia EE.UU. ha bajado respecto a otros años».

Entre los residentes de Baleares, destinos como Egipto se imponen como favoritos este verano. «Habrá hasta cuatro salidas directas desde Palma en invierno», destaca Fiol. A nivel nacional, los baleares prefieren climas más frescos en verano, como Galicia, Asturias o Cantabria. Los cruceros desde Palma también mantienen su atractivo. Y en el plano internacional, crecen las reservas hacia destinos como Mauricio, Zanzíbar, Tailandia, Maldivas o Colombia.

El encarecimiento de los paquetes turísticos sigue al alza. «Estamos pagando entre un 15% y un 20% más que antes de la pandemia», afirma Fiol. Aunque las agencias intentan contener los precios combinando servicios, los márgenes de maniobra se reducen. Aun así, el alza no ha disuadido a quienes tienen mayor poder adquisitivo, aunque sí puede haber mermado el interés de las clases medias. «Hemos conseguido atraer un turismo de mayor calidad dispuesto a pagar más por sus vacaciones, pero queda por saber si seremos capaces de mantenerlo».

Hoy en día, «viajar una semana fuera de Europa cuesta a partir de 1.500 euros por persona; mejorando alojamiento, puede superar los 2.000», destaca Fiol. La tendencia también apunta a que los residentes no se conforman con un solo viaje anual. «Aprovechamos la conectividad para hacer escapadas asequibles por Europa desde 500-600 euros».

Sobre la aplicación del Real Decreto 933/2021, que obliga a las agencias de viajes a registrar y comunicar datos de reservas de hospedaje y alquiler de vehículos, Fiol asegura que siguen sin respuestas claras. «Estamos como el primer día. Sin una orden ministerial que resuelva dudas y con una plataforma que sigue fallando», lamenta Fiol. Denuncia que la normativa, tal y como está planteada, es ineficaz y genera duplicidades innecesarias: «No podemos corroborar si la información proporcionada es veraz y no deberíamos formar parte de este registro documental».