Imagen de la presentación del Boscos llevada a cabo en Santa Clara en la noche del lunes.

TW
11

El CB Boscos presentó el pasado lunes en la pista de Santa Clara, en el marco de una muy concurrida velada, a los diecisiete equipos, incluidos el junior y el senior femenino que comparte con el CB Ciutadella, que defienden el escudo salesiano en la presente temporada 2016/17.

El reputado técnico local, Jordi Anglada, continúa un año más como principal responsable de la prolífica factoría de Ciutadella, cuyo volumen de jugadores oscila en torno a los 170, cifra «similar a la de las últimas temporadas», anota Anglada, e inviable de aumentar «por falta de espacio», matiza el preparador. No en vano, además de Santa Clara, históricamente el centro neurálgico de la entidad, el Boscos deberá recurrir a pistas de propiedad municipal para poder dar cabida a su extensa familia de baloncestistas.

Al margen, la incorporación del entrenador catalán afincado en la Isla y exintegrante del cuerpo técnico del Barcelona, Oriol Pagès, es una de las grandes novedades que proyecta el Boscos en la campaña ya en marcha. Pagès desarrolla una específica labor de tecnificación con los infantiles y cadetes del club (tanto masculino como femenino).

«Somos un club soñador», expone Anglada al ser abordado sobre los objetivos de la entidad que desde hace algunos meses preside Lluís Moll. «Estamos para alcanzar lo que los jugadores quieran soñar; la filosofía es trabajar para seguir mejorando», sigue el técnico, que, cuestionado por metas concretas, sitúa la competición «interislas» junior, la exuberante generación cadete que detenta al Boscos –campeona balear infantil y con presencia en el Nacional del curso anterior– y la acostumbrada participación en el torneo de Girona como los focos por medio de los que dar lustre a la entidad en forma de resultados.

Por otro lado, no se espera que en Santa Clara se revitalice en breve un proyecto senior masculino. «De momento, no. Nuestra política es que un senior debe estar compuesto por gente joven, y con todo el respeto, no contemplamos fichar gente de 40 años», sentencia Anglada, arquitecto deportivo del Boscos, un club soñador.