Cardona, en julio de 2017, en su casa de Es Grau | Javier Coll

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Durante este miércoles falleció Francisco ‘Paco’ Cardona Alzina, a los 81 años de edad, quien a lo largo de casi tres décadas, entre 1974 y el albor del presente siglo, fuera entrenador en el CD Alcázar, club al que prestó insobornable fidelidad –único enclave en el que entrenó– y en el que además de su labor en la cancha asumió también, en algunos pasajes de su densa trayectoria, cargo de directivo.

Educado y afable, de trato cercano y agradable, Cardona dedicó la totalidad de su recorrido en el Alcázar al trabajo de formación, a la cantera, resultando incalculable el porcentaje, por lo elevado, de niños de Maó que pasaron por sus manos. La curiosidad de sus hijos, Àngel y Xavi, por el juego de la canasta motivó la incursión de Cardona en el básquet y en el Alcázar. El resto es historia del deporte menorquín de formación, como los grandes duelos que protagonizó con Felipe Pons y Eliseo Llabrés, dos técnicos de leyenda en la factoría de La Salle y sus principales rivales en la banda, según evocaba el propio Cardona en la última entrevista que concedió a este diario, en julio de 2017.

El histórico entrenador se va justo en el año en que ‘su’ Alcázar cumple sus primeros 75 años de existencia; deja viuda, cuatro hijos, siete nietos y la estela de buena persona que se granjeó en sus algo más de ocho decenios de vida. Descanse en paz.