El alcazareño Carlos Vidal, con el balón, durante el partido que su equipo ganó al Ciutadella. | Sergi Garcia

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La segunda jornada de la Liga Balear de baloncesto tuvo como grandes protagonistas el Pinta B Es Castell y el Alcázar, ambos conjuntos suman dos triunfos y comparten el liderato en sus respectivos grupos.

Golpe de autoridad de los hombres de Joan Martínez ante el Dicars de Llucmajor (67-83) plagado de ex jugadores con pasado en la Liga EBA. Los de Es Castell realizaron el mejor encuentro de la temporada y brillaron Jan Orfila con 19 puntos, y Carlos Sintes que es duda al sufrir un esguince de tobillo, con 18 puntos. Un parcial de 0-9 tras el descanso, fue clave para firmar un triunfo de prestigio para la escuadra del este insular. El derbi que disputaron el CB Ciutadella y el CD Alcázar (69-74) fue emocionante hasta el último minuto donde se decidió a favor de los mahoneses. Los visitantes estuvieron más acertados en los instantes claves ante los hombres de Matías Castell, que con una ventaja de dos puntos a su favor a falta de un minuto, no fueron capaces de anotar ningún punto. El parcial del Alcázar de 0-7 resultó determinante.

El CCE Sant Lluís fue derrotado en su feudo por el Santa María (63-72). Los mallorquines estuvieron muy acertados desde el triple, y un parcial de 1-18 fue ya definitivo. El Jovent en su visita al Bàsquet Calvia volvió de vacio. Los hombres de Miquel Sintes tenían ante ellos un rival propicio para haber ganado, pero el desacierto determinó la derrota de los de Alaior.

Femenino

El derbi femenino fue para el CB Es Castell que fue muy superior al CB Ciutadella (69-45). Las chicas de Felipe Pons liquidaron el duelo en los dos primeros cuartos, se llegó al descanso 47-16. En el tercer y último cuarto, las de ponent mejoraron pero la diferencia ya era insalvable. Las locales se estrenan en la competición y el Ciutadella suma dos derrotas en dos jornadas. El Jovent femenino ganó al Dicars 85-47. El conjunto de Tolo Saura suma dos triunfos seguidos. Un parcial de 14-0 a favor del Jovent, fue una misión imposible para el equipo rival.