El que parece estar llamado a ser la nueva estrella del Hestia Menorca, Jermaine Marrow, en el mano a mano con Álex Tamayo. | Antxon Castresana

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Se enfrentaban esta noche en el Pavelló Menorca dos equipos en plena construcción y con unos mismos números en la composición de su plantilla –nueve fichajes y tan solo tres renovaciones–, con la lógica falta por pulir aspectos importantes del juego que se deben ir adquiriendo con el paso de las sesiones y los partidos. Eso sí, era un Liga ACB como el Coosur Real Betis, ante el Hestia Menorca, de la LEB Plata. Resultado, 92-75, en un partido con tres cuartos muy buenos de los locales, jugando de tu a tu con el rival; y un último, al que llegaron con los plomos fundidos, física y mentalmente.

Fue en el segundo encuentro del Torneo COpizza Ciutat de Maó, donde los de Javier Zamoza, tras la excelente imagen ofrecida el día anterior ante el Gran Canaria –también de la Liga Endesa–, tenían el listón muy alto. Empezó mandando el Hestia Menorca, gracias cómo no al ‘uno’, Jermaine Marrow y al interior, Logan Schilder, muy incisivo en la pintura, para marcharse 9-14 en el electrónico. Pero los del técnico Joan Plaza no estaban en la Isla de turismo y empezaban a subir sus líneas de pase en defensa, para ponerse por delante por vez primera (17-15), hasta el 22-16 final, a pesar de los intentos desde 6’75 del base local norteamericano.

Empezaba el segundo acto en un Pavelló Menorca que ofrecía una gran imagen en sus gradas y ahí estaba el Real Betis para dejar clara su categoría, marchándose hasta el 30-18 tras pisar el acelerador. Lo paraba Javier Zamora con un tiempo muerto que hacía reaccionar a sus discípulos. El cuadro sevillano se gustaba pero, de nuevo Marrow y otra de las sensaciones ante el Gran Canaria, el senegalés, Makhtar Gueye, echaban tierra de por medio desde la línea de tres puntos, acortando hasta el empate 33-33.

Disfrutaba la incondicional parroquia menorquina, viendo como de nuevo los suyos encaraban a un equipo de Liga Endesa. Con Alderete de ‘cuatro’ unos minutos y reboteando, el partido estaba en tierra de nadie pero un par de balones perdidos por forzar dentro con Smallwood eran aprovechados en transición bética, abriendo brecha apoyados por Bleijenbergh, hasta el 48-44 con el que enfilaron vestuarios los dos equipos.

Tocaba volver a remar fuerte para el Hestia, que con apenas una semana de entrenamiento, acumulaba partido y medio ya ante equipos ACB. Inicio de reanudación frenético y que no interesaba a los locales, lo que cabreaba a Zamora en el obligado tiempo muerto, con 59-48. Bajaba pulsaciones el Hestia y la personalidad de Marrow, tras triple en contraataque, metía en partido de nuevo a los menorquines. Betis anotaba en la pintura con Vitto Brown y otro triple de Gueye era el 62-56. El Hestia resistía, ante un ACB que apretaba la primera línea de pase. Con la cuarta falta de Schilder, un triple de Smallwood y dos fallos de Corbacho en 6’75 se cerraba el tercer cuarto (69-63).

Mucho más rodado el Betis, unido a su calidad y talento, agrandaron aún más el momento crítico de los locales, tras el doble esfuerzo de ayer y anteayer. Bertans y Brown disparaban el electrónico, ante un Hestia bloqueado de cabeza, llegando hasta un 80-67 ya definitivo. Ponía empeño el cuadro local pero el esfuerzo era en balde y la superioridad verdiblanca se imponía, hasta el definitivo 92-75, ante un Hestia que sí, invita a ser optimistas.

Este viernes, ACB en el Pavelló Menorca

Gran Canaria y Coosur Real Betis cerrarán este viernes (20 horas) el Torneo COpizza Ciutat de Maó, un duelo entre los dos equipos de la Liga Endesa que promete espectáculo y del bueno, jugándose el título del trofeo.