Una pequeña delegación del Hestia Menorca, encabezada por los jugadores Orel, Raül Timoner y Sorokin, salió este viernes a la calle donde atendió a aficionados y viandantes, en el centro de la ciudad | Gemma Andreu

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El nuevo Hestia Menorca entra en escena. La incorporación del ‘1-2’ puertorriqueño Jhivvan Jackson y del ‘3’ madrileño Héctor Alderete en el decurso de la última semana por parte del club menorquín, sugieren un roster sino reinventado, cuantos menos considerablemente reformado, y con esta nueva versión de equipo, a priori potenciada desde diversos flancos, el proyecto que lidera desde la banda y en los despachos el entrenador madrileño Javi Zamora se enfrasca en el tramo final de la fase regular de LEB Plata, una secuencia de ocho partidos en la que el conjunto de Bintaufa tratará de asegurar su lugar en las eliminatorias por el ascenso, y por añadidura, hacerlo en el mejor estadio clasificatorio posible (en fecha de este sábado, el colectivo insular es octavo, 10-8).

Un último tramo de calendario que empieza este sábado noche con una cita cumbre. En toda la acepción del término. Puesto que el rival que visita el Pavelló es el Mi Arquitecto Benicarló (19.30 horas), conjunto que comparte el liderato de la conferencia Este de LEB Plata junto con Albacete y Sant Antoni Ibiza (14-5), y en el que además milita el base mahonés y exjugador del Hestia Menorca, Xavi Hernández Giménez (1992), quién el verano previo y tras un trienio en la Isla optó por buscar fortuna afuera de nuestros confines y reemprender su trayectoria como jugador de exportación en las filas del conjunto del Baix Maestrat, su sexto destino en el exterior tras sus etapas en Vic, El Olivar, Alicante, Tarragona y Zamora, y donde hasta la fecha los ‘dividendos’ de la operación le están resultando francamente satisfactorios, tanto en el aspecto personal (7 puntos, casi tres asistencias y 9 créditos de valoración en más de veinte minutos por partido, los promedios del base forjado en la factoría del CD Alcázar en la presente campaña, también uno de los elementos más estimados por su nueva afición) como en el colectivo (el Benicarló, de bagaje muy tibio en LEB Plata, en tanto que apenas computa un trienio ininterrumpido en la categoría, está trazando la mejor campaña de su historia y es un claro aspirante a batallar por el ascenso).

Sin restricciones

Asimismo, el partido será el primero en los últimos dos años libre de restricciones de aforo, otro aderezo colosal que además debe contribuir a erradicar la gelidez ambiental de la que ha hecho gala Bintaufa en su periodo más reciente e incluso significarse como el punto de arranque para comenzar a recuperar esa térmica atmósfera que tanto caracterizó el hogar del equipo insular en tiempos pre pandemia. Eso en clave social; en clave estrictamente deportiva, el duelo, además del tremendo cartel que exhibe en sus prolegómenos, se presume como la última oportunidad del Hestia Menorca de mantener viva la cada vez más remota pretensión de opositar al primer lugar del segmento Este.

A una distancia de cuatro partidos de la mencionada triple cima que detentan Albacete, Sant Antoni y Benicarló, otra derrota, restando luego solo siete fechas para consumir la hoja de ruta que antecede los playoffs, desterraría cualquier opción virtual del Hestia Menorca de prolongar la aritmética en relación al liderato de grupo –que aún ganando resultará harto complicado de alcanzar– y limitaría su objetivo a lo dicho previamente; buscar un hueco entre los ocho equipos que obtendrán billete para la postemporada.

Alimenta la ambición y las expectativas del Hestia Menorca, junto con el hecho de jugar de local y los nuevos cromos que presenta en su formación, la dura derrota que el Benicarló facturó en su última salida (Canoe, 86-67), quizá un indicio de que el equipo que entrena Adrià Alonso, a pesar de la situación de privilegio que ostenta en la clasificación, puede no residir en su mejor estado de forma de la temporada. En unas horas, esta y otras incógnitas quedarán despejadas. Hestia Menorca ante Mi Arquitecto Benicarló, un duelo cumbre que incluye el retorno de Xavi Hernández a Bintaufa. Una cita de máximos, uno de los partidos del año