Biel Torres, que hizo un buen partido, ‘caza’ un rebote. | Archivo

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El Pinta B CB Es Castell cayó a domicilio en un partido intrascendente ante un potente BBA Castelldefels en plena lucha por el título de campeón de grupo y en busca del ascenso de categoría. El equipo de Gino Rovellada no se jugaba nada en el envite, pero en Can Vinader el conjunto menorquín demostró tener mucho y muy bueno, y con sólo ocho efectivos fue capaz de competir de tú hasta el final.

Aunque el partido comenzó un cuarto de hora más tarde pues no funcionaba el acta electrónica y en directo de la Federación y tuvo que hacerse al final de manera manual, todo estaba preparado en Castelldefels para una tarde de gloria, para un último partido de los catalanes frente a su afición antes de la última jornada el próximo fin de semana, donde los locales esperan salir campeones del Grupo C-1 y afrontar de la mejor de las maneras el complicado ascenso. Los preparativos y el ambiente eran tan calientes que sirva de ejemplo que a Es Castell le pitaron la quinta falta en apenas un par de minutos, mientras que el Castelldefels sólo entraría en bonus en los últimos momentos del primer cuarto.

Así y con Marc Mañés imparable desde el perímetro los locales hicieron mucho daño a un rival que pese a los muchos contratiempos jugó alegre y valiente (33-20). En el segundo periodo de nuevo nadie hizo prisioneros y en un duelo veloz con grandes momentos de baloncesto, se llegó al descanso con una renta que parecía definitiva para los locales (58-43). Pero el equipo de Gino Rovellada ya ha demostrado en esta segunda vuelta del campeonato que está hecho de buena pasta y sus pupilos no le defraudaron pues se lo dejaron todo en lo físico y lo mental. Así, jugando con ambición, ganaron el parcial del tercer cuarto y llegaron al último con opciones (79-69).

En la última manga el Pinta B Es Castell sacaría lo mejor y pondría en un verdadero aprieto a un Castelldefels lleno de dudas. Tantas que a falta de poco más de dos minutos su renta era sólo un +6, pero entonces los visitantes fallaron un triple, los colegiados expulsaron a Gino Rovellada por una segunda técnica más que discutible, y ahí todo se acabó (100-89).