Ambos equipos, menorquines y pratencs, igualan en la cúspide de la clasificación de la conferencia Este de LEB Plata cuando restan solo siete jornadas para su conclusión (15-4), por lo que la importancia de lo que depare este enfrentamiento se advierte considerable en el desenlace, si no de la temporada, sí del primer segmento del curso, el que antecede las eliminatorias por el ascenso, y que se contextualizan de modo muy diferente en caso de concluir primero de grupo o del segundo para abajo.
Al duelo llegan los dos equipos, si no en dinámicas opuestas, sí dispares. El Prat lo hace luego de haber suscrito una racha de siete victorias consecutivas, que mantiene abierta y que le ha permitido dar alcance al equipo insular en la cumbre de la clasificación. Por contra, el Hestia Menorca viaja a la plaza catalana justo después de haber perdido el primer puesto en solitario, a raíz de ceder con el Cornellà en Maó la semana anterior (en un partido de arbitraje más que molesto, desde un punto de vista insular), en lo que asimismo significó su tercer tropiezo en sus últimos seis partidos, trecho que incluyó la derrota en la final de Copa.
Como contrapartida a la posible incertidumbre que este lapso haya podido generar, el Hestia Menorca opone el esperado regreso de Edwin Jackson, que en principio reaparece este sábado después de tres semanas sin jugar por problemas físicos, y el estreno (se supone) del pívot búlgaro Emil Stoilov, proveniente de Estudiantes, de 21 años recién cumplidos e incorporado al proyecto menorquín durante esta semana. Lógicamente, este par de ‘novedades’ en relación al pasado más inmediato del Hestia Menorca alteran de modo sustancial la actual foto del equipo, que por un lado recupera a su mejor anotador (también de la liga) y hombre más resolutivo en la faceta ofensiva, como es el caso del escolta francés, y por otro, suma una nueva pieza en la rotación de su juego interior con el exestudiantil (aunque el posible rendimiento que este pueda ofrecer no deja de ser una incógnita, tanto por lo poco que lleva en el equipo, como por el desconocimiento que pueda tener o no el Prat en relación a sus prestaciones; y eso siempre que Javi Zamora opte por concederle minutos).
Importancia
El grado de impacto que la incursión de ambos puede tener en el partido, lógicamente se verá tan solo durante y a la conclusión del mismo, pero qué duda cabe de que, en una primera impresión, el Hestia Menorca que este sábado jugará ante el Prat será una versión de equipo más completa, compacta y con mayor número de efectivos en parangón a la que sucumbió en la jornada anterior. Si con eso alcanzará para contener al equipo que más puntos anota de cuantos integran la conferencia Este y que está surtido del juego interior más sólido y poderoso de la misma, es una cuestión que también encontrará respuesta a lo largo del encuentro.
El roster pratenc ostenta mucho diamante en bruto, de futuro ACB, producto de su filiación con el Joventut. A título individual, y propiedad de la inagotable factoría verdinegra, sobresale en la estructura de juego del Prat el croata Tomislav Buljan, un 3-4 que garantiza puntos, rebotes y capacidad para amenazar en numerosos espacios de la pista.
El pívot italiano Leo Okeke y el canario Miguel Malik Montesdeoca (quien fue de los mejores en el partido de la primera vuelta en Maó, donde el Prat ya ganó, 70-73) son otro par de elementos propiedad de la Penya con un peso considerable en el colectivo que dirige Albert Cañellas, los puntales del flanco más jovial de un vestuario donde también encajan perfiles dotados de mayor experiencia.
Empezando por el interior francés, ex del Hestia Menorca, Thomas Smallwood, y continuando por otro ex de la causa menorquina, el escolta badalonés Quim Salvans, también con pasado en la cantera del Joventut, sin obviar al pívot barcelonés Robert Cosialls, un tipo con recursos y oficio, forjado desde la experiencia que conceden las varias temporadas en que ha alternado LEB Oro y Plata, o el base Jofresa (hijo del legendario Rafa Jofresa y sobrino de Tomàs).
Son algunos de los rostros, que no todos, que se presumen principales puntos de amenaza de un equipo que por encima de cualquier otra consideración tiene en esa característica, en su autopercepción de lo que es ser y funcionar como un colectivo, su principal virtud y origen de amenaza.
Prat y Menorca, un duelo de líderes, un enfrentamiento cumbre cuyo resultado tendrá un doble impacto; el del valor del triunfo y su repercusión en la clasificación con el averaje de por medio, lo que multiplica el valor de ganar.
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