El unionista Camacho pugna el balón con Dani Marquès, jugador del Sami | Josep Bagur Gomila

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Combate nulo. Pretendiendo el símil pugilístico, sería esta la afirmación que más y mejor sentido otorga a lo ocurrido el sábado anterior en Ciutadella, en el duelo que enfrentó a Sami y Unión (1-1), los dos teóricos y más claros candidatos a reinar en un escenario regional insular que el pasado fin de semana consumió su séptima jornada liguera, y cuya cumbre, a raíz del referido resultado, combinado con la incapacidad del Sporting para vencer en campo del Migjorn (2-2), se mantiene aprisionada, sin cambio de líder y con estos tres conjuntos separados en el exiguo margen de dos puntos. Nadie abre brecha. Sigue el enredo en la cima.

El Sami, pese a que solo se ha embolsado dos puntos de los últimos seis que ha competido, acumula su tercera semana consecutiva en el primer lugar (la mayor longevidad al respecto en esta Liga), aunque la igualada, protagonizada con sendos goles del unionista Calero, uno en marco propio, acaso se entiende más favorable al cuadro mahonés que, con un partido menos en su hoja de ruta en relación a los de Ciutadella, ha salvado la salida más complicada y advierte la cúspide a dos puntos.

Entre ambos, en la segunda plaza, orbita el Sporting, que repitió empate por segunda jornada sucesiva. También a dos, como ante el Sami tres semanas atrás, antes del parón carnavalesco. Y al igual que los verdes de Ponent, son cuatro puntos de los últimos seis que ha dirimido de los que se ha desprendido el equipo blanquiazul (que sangra en los finales de partido). En el caso de Los Nogales, quizá una concesión excesiva incluso, lo que con certeza se sabrá en el epílogo de Liga.

La séptima jornada se postergará también como la que sirvió al otro par de equipos de Ciutadella, Atlètic (2-3 en Alaior) y Penya (3-2 sobre el Sant Lluís) para estrenar su casillero de victorias. Ambos avanzan al unísono en puntuación (5), pero no en clasificación, pues siguen último y penúltimo respectivamente, aunque sí han logrado igualar con el Alaior (séptimo, en virtud de su mejor averaje general, pero con los mismos puntos). Asimismo, el primer triunfo que se celebra en Son Marçal significa para el Sant Lluís desaprovechar una franca oportunidad de equilibrar en el tercer lugar con la Unión y de alzar la voz en la lucha por el título.