Miquel Capó, el segundo a la derecha, de frente, durante el primer entrenamiento del Mercadal que dirigió Lluís Vidal. | Gemma Andreu

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En el vestuario del Mercadal se cree en la permanencia. Con el equipo rojiblanco situado en décimo séptimo lugar de la clasificación del grupo balear de Tercera División (26), a 4 puntos de la zona de permanencia, lo que ha precipitado durante esta semana la marcha del entrenador Pere Vadell y el regreso, casi un lustro después, de Lluís Vidal al banquillo de Sant Martí, el experto central mahonés, Miquel Capó, asegura que que el colectivo rojiblanco «ve posible» revertir la situación y preservar la plaza en Tercera para la entidad y el fútbol insular por extensión.

«Nosotros hemos estado siempre con Pere Vadell y en ningún caso advertimos que no fuera posible lograr la permanencia con él al frente, pero la directiva ha decidido que era necesario un cambio y siempre es más fácil prescindir del entrenador que no de 20 jugadores; en fútbol funciona así, pero no toda la culpa es de Pere (Vadell), aunque sea él quien lo pague», analiza Capó al ser cuestionado por la trama que en las últimas 72 horas se ha desarrollado entre los muros de Sant Martí.

«El club ha apostado por Lluís (Vidal) y es evidente que tiene que haber un cambio de dinámica; con solo dos triunfos en casa, no podemos hacer otra lectura», sigue el defensa mahonés del Mercadal, convencido de que obrar la permanencia no es un imposible. «Nos queda una liga de catorce jornadas, pero vemos posible conseguir la salvación; sabíamos que bajaban siete equipos antes de empezar la temporada, tenemos que convivir y jugar con eso, pero creo que es posible que el Mercadal, y el fútbol menorquín por tanto, consigan permanecer en Tercera División», expone el zaguero en ese sentido, y precisa también que, «tras todo un año trabajando con un entrenador, esta situación no es agradable, pero también se entiende que la directiva busque soluciones; tiene que haber un cambio de chip, y se trata de dos entrenadores diferentes».

«Lluís (Vidal) nos ha transmitido su ilusión, sus ganas, cree que es posible sacar adelante la situación y lograr el objetivo, aunque está claro que habrá que remar y trabajar duro para conseguirlo», finaliza Miquel Capó