Imagen del jugador menorquín este pasado domingo durante la celebración del ascenso del Eldense a Primera. | PCP

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La Plaza Castelar de la localidad valenciana de Elda acogió anteayer por la noche una gran fiesta para celebrar el histórico ascenso del Club Deportivo Eldense a la Primera RFEF. Cientos de aficionados se reunieron emocionados para arropar a los jugadores del Eldense, que llegaron en autobús descapotable, tras recorrer parte de la ciudad. Y entre los miembros del Eldense, el veterano jugador menorquín, Pedro Capó, que suma su enésimo logro deportivo, tan solo un año después de haber descendido con el CE Sabadell de Segunda División.

Afición y equipo celebraron por segunda vez en 24 horas la victoria ante el Sestao River, lo que le llevó al equipo a subir de categoría, en la que solo ha estado una temporada. El equipo azulgrana de Capó ha destacado durante toda la temporada 2021-22 por su excelente trato del balón y su juego vistoso y ofensivo, lo que se ha traducido finalmente en el premio del ascenso.

Ayer, con algo de resaca y cansancio acumulado tras un fin de semana memorable, Pedro Capó reconocía a «Es Diari» estar «muy contento», por al ascenso. «Una alegría así no pasa muy a menudo y hay que disfrutarla. Hemos cumplido uno de los objetivos del club a corto plazo, que era ascender» señalaba, a nivel colectivo, trasladándolo también al capítulo individual. «Muy contento, he cogido mucha responsabilidad dentro del equipo con el paso de la temporada y eso es reconfortante», manifestaba el de Maó. «Un ascenso o un título es a lo máximo a lo que aspira un jugador y a mayor nivel que se compite, más difícil es lograrlo. Con este formato de play off por la clasificación de la liga regular, no nos servía el empate en ninguno de los dos partidos y ha sido complicado», quiso recordar Capó.

El centrocampista insular ha vuelto a sentirse jugador y a disfrutar, tras un curso 20-21 complicado. «El descenso del Sabadell fue duro pero al final fue desde Segunda, son palabras mayores. Es fútbol profesional en toda regla y con mucho nivel», exclama Capó, para el que «significa más por el hecho de poder competir en Primera RFEF el año próximo, cuando el pasado verano el mercado fue complicado y no fue posible encontrar un hueco allí», valoraba.

Pedro Capó en el Eldense se ha sentido «muy importante, con mucha confianza por parte del entrenador y acabando la temporada, seguramente, a mi máximo nivel. Hemos sido un vestuario muy joven, he sido de los veteranos y me ha tocado ayudar a los jóvenes, como los veteranos conmigo cuando yo empezaba», señala, muy seguro de sí mismo. «Me veo jugando en Primera y creo que me lo merezco pero nunca se sabe; también me veía jugando en Primera el año pasado y no pudo ser», dice, recordando que este año «parto con algo de ventaja al tener contrato con el Eldense».

«Me encuentro muy bien física y mentalmente, hago lo que me gusta y disfruto con ello. Mientras la ilusión por empezar una nueva temporada se mantenga año tras año siempre pensaré en seguir. He acabado mi decimotercera temporada, once fuera de casa y el camino está valiendo la pena», cerraba, emocionado y siempre arropado por su familia.