Rafa Nadal durante el partido contra Grigor Dimitrov. | SEBASTIEN NOGIER

TW
1

Rafael Nadal, cabeza de serie número 3 del ATP Masters 1000 de Montecarlo, derrotó al búlgaro Grigor Dimitrov, decimoséptimo del mundo, por 6-1 y 6-1 en menos de una hora.

Nadal comenzó el encuentro como un ciclón. Con energía, ágil de piernas y una derecha que sometió al tenista búlgaro que se mostró errático en un partido que estuvo marcado por el viento. Dimitrov, acostumbrado a desplegar una gran pegada, se mostró desesperado con la poca efectividad de su derecha ante Rafael Nadal.

El tenista búlgaro estuvo condicionado por la fragilidad de su servicio. cinco dobles faltas y solo un 45% de efectividad del primer saque en el set lastraron su juego ante el español.
Nadal no se relajó en la primera manga hasta que se puso 5-0 por delante, momento en el recibió su primer juego en contra. El acto inicial, que duró veintisiete minutos, evidenció la diferencia de garra, calidad y actitud entre los dos tenistas.

Monte-Carlo Rolex Masters tournament

El segundo parcial mantuvo la misma línea del comienzo del partido. Nadal, once veces campeón en Montecarlo, mantuvo la concentración, la intensidad y la solvencia con el saque. Movió al búlgaro de lado a lado y le sometió cada vez que sacaba a relucir su derecha liftada.

Grigor Dimitrov continuó impreciso al saque y también nervioso, lo que le llevó a cometer innumerables errores no forzados. Acto seguido, en el cambio de lado, con un 3-0 en el marcador, el tenista búlgaro destrozó su raqueta y las últimas opciones de seguir con vida en el partido.

La segunda manga terminó con otro 6-1. Nadal aflojó y bajó la intensidad sobre la pista. De nada le sirvió a Dimitrov haber preparado este campeonato en la Academia Rafa Nadal. Dio la sensación de afrontar el choque resignado, prácticamente derrotado a la pista, condicionado por el 13-1 en contra que mantiene en los enfrentamientos particulares con el español.

Rafael Nadal se enfrentará en cuartos al ganador del choque entre el español Roberto Bautista y el ruso Andrey Rublev.