El regatista del Club Nàutic Ciutadella, Felip Moll, en la ciudad francesa de Lorient, en el momento de despedirse del ‘Allevà’. 

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El regatista del Club Nàutic Ciutadella, Felip Moll, ha sido noticia por partida doble este fin de semana, ya que, por una parte, este viernes salía elegido como nuevo comodoro de Es Nàutic en sustitución de Loren Mesquida, con la nueva junta directiva que ya encabeza, Gonçal Moll. Y, a parte, después que el regatista ‘mini’ lograra la histórica gesta de completar la dura Mini Transat 2021 por el Atlántico y en solitario, ha anunciado que ha vendido su embarcación ‘Allevà’, con la intención de marcarse nuevos retos y seguir creciendo en un nuevo proyecto que podría ver próximamente la luz.

Moll pasará a ser el nuevo comodoro del CN Ciutadella, un cargo que acoge con una ilusión enorme y muy consciente que le supondrá «muchas horas de trabajo», bromea el ciutadellenc en este diario. «El hecho de poder participar en la junta directiva del club me supone una nueva etapa de aprendizaje y en un ámbito diferente», subraya el deportista, decidido a aceptar el reto y en un período muy importante en el CN Ciutadella ya que el próximo año cumple su Centenario y en el Moll de la Trona están preparando infinidad de actos sociales y deportivos.

Moll, sin dejar de adentrarse a la mar, quiere ver el funcionamiento de una entidad marítima, desde dentro. «Me anima a ser el nuevo comodoro el hecho de ver cómo trabaja el club internamente, el poder participar en la organización de regatas importantes estos años y ver su funcionamiento, motivado por ir encontrando soluciones a problemas que puedan ir saliendo», añade, teniendo claro que este cargo «por descontado, lo compatibilizaré con mi actividad deportiva. Pese a estar sin barco ahora no dejaré los ‘minis’».

A las puertas del Centenario del club de Ponent, ya está confirmado que será sede, a principios de abril del 2024, del Campeonato de Europa Sub-21 Láser, tanto en masculino como en femenino, en las modalidades de Ilca6 y Ilca7. Aparte, aún no está confirmado, pero parece que organizará el Campeonato de España de Optimist, como avanzó en este diario semanas atrás el presidente saliente, Rafel Torrent.

Ambición deportiva

Paralelamente a su nombramiento como nuevo comodoro de la entidad ciutadellenca, Felip Moll trabaja mental y físicamente en su futuro inmediato a nivel deportivo, después que este pasado fin de semana el menorquín haya ultimado en la ciudad francesa de Lorient la venta del que ha sido su barco estos cinco fructíferos últimos años. El crucero mini ‘Allevà’ ya no es propiedad de Moll al haberlo vendido a un regatista francés, con Le Crouesty, como su nuevo puerto base.

Desde la Bretaña francesa, Moll reconocía que fue un día «extraño y en el que finalmente se acababa un proyecto, con la entrega del ‘Allevà’ a su nuevo propietario y, por tanto, donde ha empezado un nuevo proyecto», señalaba el CNC. «Hemos compartido cinco años de muchas aventuras, compañero de viaje con el que hemos descubierto juntos nuevos caminos, nuevas técnicas y nuevas experiencias». Con el ‘Allevà, dice un emocionado Moll, «he vivido un crecimiento como regatista, marinero y persona espectaculares», subraya, tras navegar por el Atlántico, Mediterráneo y el Caribe, además de la Costa da Morte, mar Celta, Finisterre y golfo de León. «Me emociona pensar todo lo vivido pero ahora me toca a mí progresar y lo haré continuando en la navegación oceánica y en el mundo de los ‘minis’, con otro tipo de proyecto. Esta vez será un prototipo», avanza Moll, sin nada cerrado todavía.

Deportivamente, se congratulaba ayer el insular, «tengo diversos caminos que se me han abierto y es momento de elegir hacia dónde tirar. De momento tengo claro que mi opción es seguir en el mundo de los ‘mini’, una clase relativamente asequible, comparada con otras, como la class40 misma». En este sentido, proseguía Moll, apunta alto. «Quiero seguir participando a alto nivel y ya estoy pensando en grandes regatas como las Azores, la Mini Transat 2023 o una regata que hemos creado desde la FNOB, con recorrido Barcelona-Sa Ràpita-Sadira (Marruecos) y vuelta. Pero aún está todo por definir y lo primero es tener barco».