Presidente Hernández y directiva arroparon a las suyas el primer día. | Gemma Andreu

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La ilusión lleva dos temporadas instalada de nuevo en el Pavelló Municipal de Ciutadella con el Avarca de Menorca de la Liga Iberdrola femenina de voleibol. Tras dos años seguidos en los que la escuadra de Bep Llorens se ha codeado, tanto en la competición doméstica como en la Copa de la Reina, entre los mejores –con el añadido del título de la Supercopa de España del año pasado en Ciutadella –, desde ayer el conjunto ciutadellenc abrió la pretemporada 2021-22. Y lo hicieron ayer Llorens y compañía con una plantilla que vuelve a despertar expectación entre la entendida afición local.

Con cuatro caras nuevas y el resto jugadoras repetidoras, el Avarca de Menorca echó a rodar a primera hora de la tarde de ayer, con las miras puestas en la primera jornada liguera, en la que las bermellones se medirán en su pabellón al Emevé Lugo gallego para, una semana después, vivir ya su primer planto fuerte, a domicilio y ante otro de los grandes, el La Laguna. En mente de la junta directiva que preside Andreu Hernández, y del cuerpo técnico y la plantilla, seguir con las buenas sensaciones del año pasado, llegando a la fase final en Copa y Liga e intentar dar un nuevo paso adelante. Y para ello, en el Pavelló se han reforzado a conciencia, con tres jugadoras que llegan directamente para poder ser titulares, como son la opuesta colombiana Wanda Banguero –que regresa tras un año en el Sayre canario –, la central serbia Iva Pejkovic –de los fichajes más sonados de la era Llorens– y la colocadora María Figueroa, que viene para compartir puesto con la directora de orquesta, María Barrasa.

Wanda está llamada a ser la nueva referente en el ataque menorquín, formando un tándem letal con la máxima anotadora histórica del equipo, Maira Westergaard. Junto a ellas, la variedad ofensiva en la red que otorgará Pejkovic hacen que el Avarca crezca en ataque, manteniendo, tanto o más importante que el capítulo de llegadas, la estructura que el curso pasado tantas tardes de alegrías le otorgó. Una piña de equipo ahora reforzada con más talento y experiencia todavía, con el permiso de la joven de Sóller, Sara Sánchez, la nueva promesa local.

Trabaja desde ayer el Avarca con la clara intención de llegar a la segunda jornada de liga, ante el Haris en Canarias, a un nivel ya óptimo para intentar dar el primer golpe sobre la mesa, en una liga que se presenta de nuevo muy competida. Con cuatro o cinco equipos aspirantes a estar arriba, IBSA Las Palmas presenta un bloque de mucho poderío individual; eso sí, ante el ‘colectivo’ del Avarca mismo. Ya se verá...

Laura Weingart, en Mallorca

La única ausencia ayer en la primera sesión en el Pavelló fue la de la joven central mallorquina, Laura Weingart –otra de las renovaciones –quien permanece en la isla mayor acabando un tratamiento de fisioterapia por sus problemas de la rodilla, hasta el 8 de septiembre, cuando se incorporará al equipo.