Entre todos los alumnos en el centro se hablan 14 lenguas diferentes y ayer compartieron comida de diversos países. | Javier Coll

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El instituto Pasqual Calbó de Maó vivió ayer las que posiblemente fueron sus dos horas más intensas del curso. Y lo hicieron para conmemorar una doble fiesta, la del Día Mundial Forestal y de la No Discriminación Racial, en la que participaron cerca de medio millar de alumnos del centro. La iniciativa, que se celebra este año por primera vez en el instituto, se ha querido hacer coincidir con el inicio de la primavera, explica Josep Xabuch, coordinador de la comisión ambiental del centro, quien con la colaboración del resto del profesorado y la participación de la Apima, sacaron adelante una jornada que califican como «todo un éxito».

La primera hora de la fiesta estuvo dedicada al medio ambiente. «Es clave, y para ello trabajamos desde la comisión, concienciar sobre la importancia de mantener la naturaleza de cara al futuro», explica Xabuch. Y para lanzar un mensaje al respecto, los alumnos plantaron árboles en su patio.

Un toque internacional

Una vez concluido el trabajo, los estudiantes participaron en una lectura de poemas conmemorativos y frases célebres de Nelson Mandela recitadas en las 14 lenguas diferentes que conviven en el centro educativo. La multiculturalidad también estuvo presente en la comida de hermandad que celebraron a continuación, y en la que se degustaron productos típicos de los diferentes países de los alumnos matriculados en el «Pasqual Calbó».

Medio ambiente
Una vez repuestas las fuerzas, los alumnos participaron en diferentes talleres, uno de los cuales resultó en la construcción de un árbol de estructura metálica decorado con fotografías de los alumnos en forma de hoja. También se fabricaron jaulas para el pájaro carbonero, que se alimenta de la procesionaria, y se impartieron cursos para la fabricación de carteras con tetra-brik y una clase el laboratorio de física para reciclar papel.